La Comisión Provincial de Patrimonio ha dado luz verde al proyecto de construcción del subtramo III entre San Lázaro y la Macarena de la Línea 3 del Metro de Sevilla aunque establece una serie de cautelas de control arqueológico durante las obras "dada la indeterminación de la localización" de los posibles restos arqueológicos, por lo que, en función de los resultados, "se podrá cambiar a la modalidad de excavación arqueológica en extensión".

Según ha informado la Junta, el tramo en cuestión tiene una longitud de casi 8 kilómetros, cuenta con doble vía subterránea en su mayor parte, una estación en superficie y once estaciones subterráneas. El tramo en cuestión "presenta una única alternativa de trazado subterránea, sensiblemente por el eje de la Dr. Fedriani y la calle San Juan de Ribera", destaca Patrimonio, que recuerda que, dado el calado de las obras previstas, así como su recorrido por "algunas de las zonas más significativas del casco urbano de la ciudad", ya se realizaron los pertinentes estudios arqueológicos, con la finalidad de realizar un diagnóstico y proponer una serie de "medidas correctoras que se anticiparan al posible impacto de las obras sobre el substrato arqueológico".

Así, apunta Patrimonio, "dada la indeterminación de la localización de los restos arqueológicos, se propone una cautela de control arqueológico de movimientos de tierra". De esta forma, el control arqueológico se realizará "durante las fases de retirada de pavimento, desvío de instalaciones de servicio, apertura de zanjas para la ejecución de muretes guía, ejecución de pantallas, y con especial atención a las terreras que se generen como consecuencia de las excavaciones a cielo abierto entre pantallas".

En función de los resultados de la actividad y si estas son positivas, "se podrá cambiar a la modalidad de excavación arqueológica en extensión", concluye la Comisión de Patrimonio para emitir su informe favorable, "teniendo en cuenta las cautelas y anotaciones", ya que entiende que las actuaciones propuestas "son adecuadas para la conservación del patrimonio arqueológico y los inmuebles catalogados BIC y sus entornos".

Obras de seguridad en el Patio de Banderas

Por otra parte, Patrimonio ha informado la memoria técnica de actuaciones de acondicionamiento y de medidas básicas de seguridad de la casa n.º 7- 8 del Patio de Banderas del Alcázar, que son propiedad del Patronato del Real Alcázar de Sevilla, requiriendo información sobre algunas de las actuaciones propuestas.

La casa nº 7-8 es un inmueble que en los últimos años fue objeto de una intervención arqueológica que sacó a la luz el palacio erigido en ese lugar entre los siglos X-XI. Tras ella, Patrimonio del Estado llevó a cabo el “Proyecto básico y de ejecución de obras de reforma, consolidación estructural y de la envolvente y acondicionamiento del edificio”, así como otros trabajos complementarios. Con la intervención se reparó la muralla, la torre del León y los vestigios del palacio islámico de Al-Mutamid.

Estas obras "tienen carácter de obra menor, son reversibles y no suponen una afección negativa al BIC “Reales Alcázares” a la muralla histórica ni al Conjunto Histórico de Sevilla, y para garantizar la estabilidad de los materiales para su correcta conservación preventiva, mientras se le confiere un uso definitivo que ponga en valor los vestigios del palacio". Son actuaciones con materiales adecuados, respetuosos con los valores a proteger del bien. "No obstante, Patrimonio ha decidido solicitar más información sobre algunas de estas intervenciones", apuntan desde la Comisión.

Subsanación de fichas de los tinglados del Puerto

Patrimonio también ha informado la solicitud presentada por la Autoridad Portuaria de Sevilla relativa a la propuesta de subsanación de las fichas CP-087 “Muelle de Tablada y tinglados de mercancías” y CP-088 “Pabellones de Exportación del Puerto, Avda. de La Raza”, del Catálogo Periférico del Texto Refundido del Plan General de Ordenación Urbana de Sevilla (TRPGOU), que ha presentado la Gerencia de Urbanismo, con la documentación técnica y fotográfica que justifican la subsanación, propuesta de nueva redacción de las fichas de protección, el informe de valores patrimoniales realizado por el IAPH que reconoce su valor patrimonial como grupos de naves de edificios de un diseño cuidado con fachadas regionalistas, de buena construcción, aunque se hallan muy deteriorados, y finalmente el Informe del Servicio de Planeamiento y Desarrollo Urbanístico de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Sevilla.

El contenido de estas fichas tratan de un conjunto de naves adosadas formando calle en las intersecciones, en contacto con el muelle de Tablada a través de su parte trasera, construidos con ladrillo y cerámica que envuelven una notable estructura mixta de hormigón armado y acero, novedosa en su época. Los muros de carga de fachada y los pórticos de hormigón armado forman una galería perimetral de cubierta plana, envolviendo otro sistema porticado que recibe una sucesión de cerchas de acero, formando una cubierta inclinada a dos aguas.

Actuaciones en el Parador de Carmona

Por último, en Carmona, Patrimonio ha informado favorablemente la memoria descriptiva propuesta para el suministro e instalación de un sistema de seguridad y control de accesos al parking del Parador Nacional de Carmona. Para ello se propone la colocación de un sistema de control de accesos con sistema de captura de matrículas en operaciones de entrada y salida con vehículos con control de una barrera eléctrica con mástil de 3 mts de longitud.

La intervención se localiza en el acceso al antiguo patio de armas del Alcázar del Rey Don Pedro, gran recinto rectangular utilizado actualmente como aparcamiento del Parador de Turismo, y que está conformado por tres fachadas del edificio turístico y por las murallas del complejo defensivo. Las actuaciones propuestas no parece que vayan a suponer una afección negativa al BIC “Alcázar de Arriba”, aunque tal y como sugieren los informes municipales sería conveniente emplear materiales con terminación similar a los ya empleados en el recinto para los elementos del sistema de control, y retranquear dicha instalación para evitar su visión desde el exterior.