El grupo municipal socialista ha considerado que la previsión de ingresos del borrador de presupuestos para 2024 "está tan sumamente inflada que conduce a unas cuentas irreales e inventadas" y considera "harto complicado" negociar sobre unas cuentas que esperan sean aclaradas por el equipo de Gobierno de José Luis Sanz.

"Llegan a tal extremo que asigna una recaudación desmesurada en impuestos que el propio José Luis Sanz ha dicho que rebajaba y con cifras desorbitadas en el IBI, el IAE, el impuesto de plusvalías o la tasa de basura, e incluso se recoge el doble para las tasas por casetas de la Feria de Abril, sin que éstas se hayan modificado y teniendo en cuenta que el número de casetas son siempre las mismas", ha detallado la portavoz adjunta del PSOE municipal, Sonia Gaya.

En consecuencia, "negociar sobre cuentas de ingresos inventadas resulta harto complicado, así que confiamos en que se nos aclaren muchas de las partidas de incluidas en el borrador que nos ha trasladado el equipo de Sanz y que también ya ha trasladado al Consejo Económico y Social. El PSOE municipal es un grupo serio, un partido de gobierno que trabaja con rigor y, por tanto, exige la misma seriedad al actual gobierno de la ciudad", ha advertido Gaya.

"Es además completamente falso que ese mayor volumen de ingresos fiscales obedezca a una mejora de la eficiencia a la hora de la recaudación, tal y como pretenden vender, y lo que sí está muy claro es que pedirán un préstamo bancario de 61 millones de euros, siendo un importe que, a partir de 2025 -el de 2024 es de carencia- incrementará la deuda viva del Ayuntamiento de Sevilla, rompiendo así la tendencia hacia su progresiva reducción de los últimos años", ha explicado Gaya y recogido el PSOE en una nota de prensa.

El grupo municipal socialista ha acusado al gobierno municipal de presentar un borrador "tan poco trabajado que copia en innumerables cuentas de ingresos las mismas partidas, incluidos sus céntimos de euro, de las previsiones de ingresos existente en el Presupuesto de 2023, cuyas previsiones iniciales y las posteriores desviaciones al alza o a la baja han estado muy condicionadas por la salida de la crisis tras la pandemia, el escenario de inestabilidad por la Guerra en Ucrania y la subida de la inflación".

Ante esta situación, Gaya ha sostenido que "no tienen en cuenta ni el escenario actual ni el avance de la liquidación del presupuesto de 2023 -con sus niveles de recaudación incluidos-, que ya existe y es el que debería marcar la referencia a la hora de hacer un nuevo presupuesto".

En aquellas partidas que sí cambian, el PSOE ha asegurado que "afloran unos ingresos muy por encima de ese avance de la liquidación". Así, y a pesar de la rebaja del 1% para el IBI aprobada en las Ordenanzas Fiscales para 2024, se prevén cuatro millones de euros más, 3,5 millones más en el ICIO (Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras) y 1 millón más en el IAE (Impuesto de Actividades Económicas), ambos también con rebaja impositiva del 1% y, además, con el 2,5% de bonificación en las domiciliaciones.

En el caso del Impuesto sobre el Incremento de Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana (Plusvalía), el aumento sobre el avance de liquidación es de siete millones de euros, y de hasta doce millones en la tasa de basura pese a la congelación de la tasa que está comprometida. Para las multas por infracciones de circulación contemplan tres millones de euros más, y "caso curioso el hecho de duplicar el volumen recaudado por las tasas por las casetas de la Feria de Abril de 2024".

"En definitiva, el equipo de Sanz ha engordado ficticiamente los ingresos de 2024 para vender un crecimiento del Presupuesto municipal en 83,79 millones de euros (8,83 por ciento), hasta los 1.032,34 millones. Si se basa en las previsiones de 2023, cuyo inicio fue económicamente inestable y con una importante subida de la inflación, y no en los avances de la liquidación de ingresos, resulta que Sanz está haciéndose trampas al solitario", ha argumentado Sonia Gaya, quien ha puesto el énfasis en el endeudamiento.

En concreto, para 2024, el equipo de Gobierno pedirá a los bancos 61 millones de euros -para 2023 se habían previsto 38 millones, de los que 26 se solicitaron en el primer semestre de este año-. A excepción de los compromisos de inversiones asociados a la ampliación en marcha del Metrocentro (tranvía), el destino de ese "importante volumen crediticio" se distribuye entre una "amplia gama de iniciativas que no incluyen ningún otro proyecto de envergadura, de forma que el equipo de José Luis Sanz ha tirado por una vía fácil y rápida, que es pedir dinero al banco, en lugar de trabajar con mayor rigurosidad en la configuración de un presupuesto de ingresos", ha afeado la portavoz del Grupo Municipal Socialista. Ese importe supondrá, según el PSOE, "traspasar sobradamente el listón de 40 millones a partir del cual se incrementará la deuda viva municipal, frente a la tendencia a la reducción que han marcado los últimos ocho años de mandatos socialistas".

Bueno recuerda las desviaciones de los presupuestos del PSOE

Al respecto, el delegado de Hacienda, Juan Bueno, ha afirmado que “el presupuesto de ingresos no está inflado y recuerda al PSOE que en sus cuentas los ingresos presentaban desviaciones  muy importantes respecto de lo presupuestado”.

Bueno ha señalado que “durante el gobierno socialista las previsiones de ingresos tributarios fueron muy superiores a las recaudaciones finales, justo lo que ahora critican”.

Ha detallado que “el presupuesto de ingresos no está inflado, antes al contrario, sus previsiones son moderadas y prudentes, sobre todo en lo atinente a la participación en los ingresos del Estado, que es una partida muy cuantiosa del presupuesto de ingresos, y que, sin embargo, se ha presupuestado incluso por debajo de lo que se prevé recaudar considerando las últimas informaciones dadas por el Ministerio de Hacienda en la Comisión Nacionalde Administración Local”.

Respecto a los tributos locales, la previsión de ingresos ha tenido en cuenta los datos facilitados por el programa de gestión de ingresos tributarios y otros ingresos de derecho público y privado de la Agencia Tributaria de Sevilla (ALBA). También se han tenido en cuenta las modificaciones de las ordenanzas fiscales de impuestos y tasas y de las ordenanzas reguladoras de los precios públicos, aprobadas provisionalmente y pendientes de aprobación definitiva”.

Además, en lo que respecta a los tributos, en cuanto al IBI, además de la evolución de la gestión recaudatoria de 2023, se han modificado las bonificaciones fiscales que afectan al tributo y se ha considerado el crecimiento vegetativo de la gestión del impuesto, tanto a nivel catastral como municipal. En cuanto a las plusvalías, se ha tenido en cuenta el actual escenario inflacionista de la economía y los ingresos obtenidos por la Inspección de los Tributos. A ello se le une la práctica desaparición de la litigiosidad sobre este impuesto al haberse modificado la normativa reguladora de la estructura del tributo, que suponía la imposibilidad de recaudar liquidaciones impugnadas respecto de las que hubiera acordado la suspensión.

“Por lo que no se entiende las críticas del PSOE y que vean complicado negociar cuando no se ha inflado nada y son unos presupuestos pensados por y para la ciudad de Sevilla”, ha manifestado Bueno. Ha añadido que “tenemos la mano tendida a todos los grupos políticos, para pactar por Sevilla y el interés común con  diálogo y consenso”.

Por otro lado, ha recordado que “la deuda se mantiene en niveles muy razonables, en torno al 35%, respecto de la última liquidación presupuestaria, ratio usualmente empleado para medir el endeudamiento, el porcentaje de endeudamiento del ayuntamiento de 2024 será incluso inferior al de 2023”.

Bueno ha concluido que “hemos presentado un documento sin líneas rojas. La única línea roja es el interés de Sevilla. Que la ciudad funcione y que los sevillanos perciban que hacemos política útil, huyendo de la confrontación”. Ha recordado que “las cuentas están centradas únicamente en Sevilla, los sevillanos, los barrios y la mejora de los servicios públicos. Los pilares son claros: La potenciación de los servicios públicos y los derechos sociales; la disminución de la presión fiscal con el fin de dejar en el bolsillo de los sevillanos más de 4 millones de euros y, por supuesto, el impulso de la actividad empresarial, industrial y comercial, apostando firmemente por Cartuja y los parques empresariales”.