Thomas Delaney no está contento con sus minutos en el Sevilla. El danés ha hablado sin pelos en la lengua sobre su poca participación en el conjunto nervionense y lo frustrante que está siendo para él la situación.
En una entrevista con la agencia Ritzau, el mediocentro ha dejado claro que "no fui a Sevilla a beber Rioja y comer tapas. Fui al Sevilla para jugar. No es un secreto que, ni para el Sevilla como club, ni para mí personalmente, las cosas no han ido como esperábamos".
La falta de minutos con el Sevilla tiene una parte positiva para Delaney, y es que llega muy fresco al Mundial: "No tengo las piernas cargadas. Claro que me habría gustado jugar más, pero ahora estoy aquí sin haber jugado mucho. Lo bueno es que tengo las piernas más frescas y la mente despejada", dijo.
El futbolista es uno de los jugadores del Sevilla que se encuentra en la rampa de salida y que podría marcharse en el mercado de invierno. De hecho, ya está siendo vinculado con el Copenhague.
