RENFE reactiva desde este lunes los viajes de sus trenes turísticos tras la paralización por la pandemia con el primer trayecto del Al Andalus desde la estación de Santa Justa de Sevilla, un tren que tiene programadas 16 salidas hasta el próximo octubre, y todas están llenas.
El presidente de la compañía, Isaías Táboas, ha sido el encargado de presentar la oferta precisamente en el propio Al Andalus, y ha dicho que en este tipo de trenes a los viajeros que compraron sus billetes para 2020 se les ha respetado la reserva de forma prioritaria.
Además del tren andaluz, el Transcantábrico Gran Lujo mantiene su ruta entre San Sebastián y Santiago de Compostela a través de la Cornisa Cantábrica, el Costa Verde se estrena entre Bilbao y Santiago, y el Expreso de La Robla se centra en rutas del Camino de Santiago.
Las propuestas de todos estos trenes incluyen el alojamiento en habitación, con cuarto de baño completo incluido, junto a todos los gastos de autobús y entradas de las actividades que se contraen durante el viaje.
El billete lleva aparejada la posibilidad de tener un descuento del 50 % en AVE o ALVIA para los traslados de acercamiento a las estaciones de salida y de retorno al punto de origen, siempre que sea en territorio nacional.
Táboas ha recordado que este tipo de servicios están enfocados a un cliente de alto poder adquisitivo, “que deja ingresos en el país durante su estancia y el sector turístico”, y que, ahora, el objetivo es “atraer nuevos viajeros al tren, dándoles nuevos productos”, como los servicios de Alta Velocidad en zonas costeras, “que queremos que se aprovechen al menos una vez durante su estancia, de modo que el turismo deje un día la tumbona y visite el país aprovechando nuestros trenes”.
Una oferta ligada “a un sector que llega en avión, que son unos 60 millones de turistas en 2021, que están con nosotros de siete a diez días”, y pasan sus vacaciones en playas “donde tienen cerca la Alta Velocidad”, ha concluido.
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