La ley de la oferta y la demanda se está cumpliendo a rajatabla este invierno en el sector agrícola local. A menor producción, más precio. Así ocurrió hace 10 días con la ola de frío polar que asoló España. Pese a que en Sanlúcar no llegaron a registrarse heladas, la escasez de producción en otros mercados elevó la demanda de los productos agrícolas locales, en especial, del calabacín, que llegó a venderse por encima de los tres euros en los mercados locales, como Frusana.
Sin embargo, según ha explicado a este medio el presidente de Frusana, Juan Manuel Rodríguez Molinares, ahora la situación se ha invertido. "Al estabilizarse los precios y haber más producción, los precios se han desplomado", en un 300% en el caso del calabacín, que se vende ahora por menos de un euro. Una situación que también afecta al resto de productos de temporada, como el rábano, la zanahoria o el puerro.
Las cooperativas locales exportan principalmente a Inglaterra, Francia, Bélgica, Holanda, Dinamarca, Suecia, Polonia o Checoslovaquia, entre otros países extranjeros.