El Ayuntamiento de San Fernando continúa trabajando y planificando la vuelta del Mercadillo de la Magdalena, y los otros de la ciudad, como el de San Antonio y el de segunda mano, en el marco de la desescalada de las restricciones para poner freno al coronavirus Covid-19. En este sentido, ya se está analizando con detalle la normativa de obligada aplicación que no se ha dado a conocer hasta este fin de semana, y que será la que va a regular las medidas que hay que adoptar para permitir la vuelta de este mercado ambulante según la evolución de la situación, así como la fecha en la que se podrá hacer efectiva, que se va a alargar y como pronto será en la fase 2, con las reservas propias que hay que tener en cuanto a la entrada en la misma y las normas concretas que se le apliquen.
Hay que recordar que hasta la publicación de la orden ministerial el pasado fin de semana, solo había algunas indicaciones al respecto de las medidas que se iban a exigir para controlar el aforo y para ampliar el distanciamiento entre puestos, además de algunas indicaciones generales y escuetas incluidas en la orden que se publicó en el ámbito de aplicación de Formentera, la Gomera, el Hierro y la Graciosa (que habían iniciado antes las fases de la desescalada).
Sin embargo, ahora la regulación ya es más específica y detallada, y a la vista del primer análisis queda claro que hay algunas actuaciones de las que se deben tomar para la vuelta del mercadillo que van a alargar mas allá de esta primera fase.
El Ayuntamiento sigue trabajando de la mano del sector de los vendedores ambulantes, con los que ya ha mantenido encuentros técnicos, para especificar todas las medidas reguladoras que hay que poner en marcha para propiciar el regreso del mercadillo.
No en vano, esta vuelta será un paso más para la recuperación económica de la ciudad, aunque en estos momentos ese objetivo debe ir de la mano de otro prioritario: garantizar la salud de la ciudadanía.
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