San Fernando respira Halloween por todos sus rincones dentro y fuera de sus hogares. Aunque la calle Real y sus alrededores se conviertan en el centro neurálgico de esta festividad, también se vive intensamente en sus barrios, bares y sus comercios.
Desde hace casi una década, el Ayuntamiento convoca el
certamen de ambientación para
promover la participación de la ciudadanía y del empresariado local. Particulares, hosteleros, colectivos, centros escolares, asociaciones sin ánimo de lucro, así como comercios y la hostelería isleña participan en un concurso que cada año más nivel.
El jurado otorgará hasta cuatro premios en cada una de las categorías en base a la originalidad, la calidad ornamental, el diseño terrorífico, la contribución a la decoración de la ciudad y la adaptación a la temática de 2024. En la categoría de particulares, habrá un primer premio de
300 euros, de
220 euros el segundo, de
170 euros el tercero y
140 euros el cuarto.
Para ir abriendo boca, hemos hecho
un recorrido por los siete participantes que concurren en esta edición con unas propuestas que no dejan indiferente a nadie:
Maribel Gómez (calle Chile, número 20, en Camposoto) no lleva muchos años en San Fernando, pero vive Halloween con intensidad. Antes participaba en el túnel de la Asociación de Vecinos Distrito Sur Camposoto, pero este año no se organizaba nada y no quería que los niños y niñas del barrio se quedaran sin una actividad cerca. Por esta razón, se ha animado a participar por primera vez este concurso. Su decoración lleva por título
‘No todas las brujas viven en Salem’ y ya está causando sensación entre los más pequeños del barrio. Su casa, pintada de verde, ya es en sí es muy particular.
Mientras que la fachada está pensada para un público más infantil, el patio, donde ella y su marido recibirán las visitas el día de Halloween disfrazados conforme a la temática de este año (Brujas y Hechiceros), reúne una propuesta más seria y terrorífica.
Para la
decoración ha optado por elementos reciclados, con elementos como maniquís de comercios. Además, esta familia ha convocado un concurso de dibujo particular para los niños y niñas que visiten su casa en Halloween, y también se ha acordado de una categoría para las mascotas.
Es el primer año que
Penélope Montero (en la avenida Ronda del Estero, 28. Bloque 7 1ºD toma parte en este concurso. Vive en un bloque de pisos, por lo que las posibilidades visuales son más limitadas que en un unifamiliar. No obstante, ha puesto toda la carne en el asador con su decoración ‘Mesón el Aquelarre’. El exterior de su casa da a la rotonda y es un primero, con lo que dará mucho juego tanto a los conductores que circulen en la zona como a los viandantes y, sobre todo, a los más pequeños.
La puerta de la entrada de su casa está decorada simulando un mesón que el día 31 de octubre cerrará para celebrar su aniversario. Junto a la entrada, un fantasma y un cartel en el que se puede leer
“Gran bufet de para niños”, lo que despierta la duda de si los niños y niñas que acudan a pedir caramelos acabarán siendo parte del menú.
Desde sus tres ventanas pueden verse tres escenas: En una de ellas se aprecia la silueta de varias brujas cocinando; en la siguiente ventana se ve a brujas comiendo y bebiendo y desde la tercera puede verse una jaula llena de niños y niñas esperando su turno para ser devorados.
Sonia Fernández (Calle San Diego Alcalá, 14. 1º) también se ha animado por primera vez a concursar y lo hace
con una decoración titulada ‘Se armó el Aquelarre’. En su caso, se ha ceñido a rajatabla a las bases y toda la decoración está hecha con material reciclado hasta el último detalle. Así, desde su ventana asoman tres brujas cogidas de la mano, pero que están elaboradas con palos de escoba, cojines, bolsas de basura, retales de tela, periódicos, revistas y folletos de publicidad y hasta extensiones de pelo reciclados. También protagonizan la escena unas arañas gigantes, que por su puesto son también de segunda mano. La puerta de su vivienda también está decorada para recibir a los niños y niños que visiten ‘Se armó el Aquelarre’ para pedir caramelos.
Para
Ana Albiol (Avenida Ronda del Estero, 70. Portal 1 segunda planta puerta 5) también es su primera vez. Se decidió a participar animada especialmente por sus hijas. En su vivienda vive "el fantasmita feliz". Como cuenta, Olivia tiene cinco años, es simpático y no da escalofríos y cuelga en una cuerda por el aire para ser feliz con el gran levante.
Nazaret Serván (calle Nautilus bloque 1 portal 6 piso 2C) fue la ganadora del primer premio el año pasado.
Este 2024 repite con una decoración titulada ‘Venid y moriremos todos juntos’. Una escena muy conseguida, con animación y que califica de terrorífica. Veterana en el concurso, ha ampliado el espacio y ocupa dos pisos para escenificarla ceremonia de una boda con invitados variopintos, desde un Jocker a un cura o la niña del exorcista y, por supuesto, los novios.
Eloísa Mena (Avenida Ronda del Ester, 29. Porta 6 2C), también es veterana y en 2023 se hizo con uno de los premios. Lo tiene todo preparado, pero está pendiente del tiempo para empezar a montar la decoración, que se inspira en un pasaje del terror que se apreciará desde la ventana.
Cuadros antiguos, telarañas y una muñeca gigante aterradora formarán parte de una decoración con la que está dispuesta a sorprender.
En casa disfrutaron tanto de de esta experiencia el año pasado, hasta el punto de que ella y su marido se han inscrito este 2024 por partida doble: en la categoría de particulares en su vivienda y en la categoría de comercio con una asesoría situada en el centro.
La decoración el ‘El Balcón de los Hechizos’, en la calle Marconi, 18. Piso 3ºD, completa la participación en este concurso.
El Ayuntamiento agradece la implicación de la ciudadanía con Halloween, que contribuye de esta forma a que la fiesta se viva y llegue a cada vez más rincones de la ciudad. Un certamen que crece en participantes cada año y que se espera que siga creciendo en el futuro para el disfrute de mayores y, sobre todo, de los más pequeños con su truco o trato y convirtiendo a San Fernando en el máximo referente de Halloween en la provincia y uno de los destinos preferidos en todo el país.