Nuevamente hemos sido testigos de la complicidad entre el Rey Felipe VI y la Princesa Leonor. Un año más, el Desfile militar del 12 de octubre ha sido presidido por los reyes y por su hija, la princesa de Asturias, y allí hemos podido ver cómo padre e hija compartían confidencias.
La Princesa Leonor ha lucido en un día como hoy el uniforme de gala de color azul marino de guardiamarina, con el que se ha mostrado radiante.
Una vez en la tribuna, la fuerte lluvia ha provocado que en varias ocasiones la princesa y sus padres se removieran de sus asientos. Muy pendiente de los pasos del Rey Felipe VI, Doña Leonor seguía sus pasos y evitaba cualquier despiste.
La Reina Letizia, en un segundo plano, se apoyaba en una de las paredes para evitar mojarse por la fuerte lluvia y, al percatarse de esta situación, su hija se acercaba a ella y conversaban con gestos de cariño.
Más cercano todavía hemos visto al rey con su hija, con quien ha compartido en multitud de ocasiones palabras y miradas de orgullo. Desde hace ya unos años se habla de la gran complicidad que existe entre padre e hija y lo cierto es que cada vez que acuden juntos a un acto público lo confirman, como en esta ocasión.