El Grupo Scout Eryteeia ha finalizado con éxito su campamento de verano, realizado en Benamahoma en los primeros días de agosto. Durante ocho días, más de cien jóvenes y monitores scouts han disfrutado de una experiencia única en un entorno natural privilegiado, enriquecida por la participación de scouts de diferentes culturas.
El campamento se ha caracterizado por una amplia variedad de actividades diseñadas para fomentar el espíritu de equipo, la creatividad y el amor por la naturaleza. Las mañanas comenzaban con juegos dinámicos que promovían la actividad física y la cooperación entre los participantes, seguidos de talleres educativos que abarcaban desde manualidades hasta habilidades de supervivencia. Las tardes se llenaban de canciones, danzas y salidas por la naturaleza, permitiendo a los jóvenes conectar con el entorno y adquirir un profundo respeto por el medio ambiente.
Además, los talleres de conocimiento del medio brindaron a los scouts la oportunidad de aprender sobre la flora y fauna local, así como sobre la importancia de la conservación del medio ambiente. También se dedicó un día para el conocimiento de las culturas nórdicas, celebrándose un día ambientado en los vikingos, dándose a conocer aspectos de esta sociedad. Ese día todas las actividades estuvieron ambientadas, realizándose numerosos talleres y juegos.
Otro de los días se dedicó a profundizar en el conocimiento del sendero del rio que va desde Benamahoma hasta El Bosque, realizando todos los componentes del campamento dicha ruta.
Uno de los aspectos más destacados de este campamento ha sido la participación de nueve scouts del Grupo Scout de Tánger, pertenecientes a los Scouts Hassanies de Marruecos. Estos jóvenes han participado plenamente en todas las actividades, aportando una valiosa enseñanza de conocimiento intercultural y de respeto hacia otras culturas, lo que ha añadido un valor especial a la experiencia para todos los participantes.
El éxito del campamento también ha sido posible gracias a la labor del equipo de cocina, compuesto por padres de los propios scouts. Este equipo se encargó de elaborar un menú adaptado a las necesidades del campamento, asegurando que todos los participantes contaran con una alimentación saludable y equilibrada durante su estancia. "Este campamento ha sido una oportunidad única para nuestros jóvenes de desconectar de la rutina diaria y sumergirse en la naturaleza, aprendiendo valores fundamentales como el compañerismo, la responsabilidad y el respeto por el entorno", declara el grupo scout en un comunicado.
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