Este no es un domingo cualquiera. Y no lo es, porque tal día como hoy de 1977 se unieron felizmente en matrimonio dos personas muy queridas en La Isla, de las que no puedo ocultar el gran cariño y afecto que les tengo desde hace muchos años, sin que me ciegue la pasión de familia que, aunque lejana lo soy. Me estoy refiriendo a mis queridos amigos Mari Carmen Rodríguez y Diego Montero, más conocido popular y cariñosamente como
Yeyo; quiénes además de crear una maravillosa familia formada por Dieguito, Eli, Cuca y Fauli, para satisfacción de los que amamos este bonito y apasionante mundo de la Gastronomía-Hosteleria isleña, fundaron hace, precisamente hoy tambien, 20 años uno de los establecimientos de eventos gastronómicos colectivo más importante de Andalucía e incluso, me atrevería a decir, del resto de España, como es el archi conocido y prestigioso celebraciones
Yeyo.
Dos efemérides (16 de abril de 1977 y 16 de abril de 2023) muy importantes que, cómo hará a lo largo de esta jornada esta gran familia y algunos que otros amigos de los miles que tiene ésta, necesariamente hay que festejar pero no sólo los que de una u otra manera estén -o estamos- involucrados en este digno sector; sino que todos los isleños deberíamos festejar, porque con la ingente labor que esta pareja ha desarrollado desde que hace 46 años decidieron emprender este proyecto de vida en comun han contribuido constante y continuamente con su duro trabajo en dignificar a este gremio como es el de la restauración isleña.
Por su parte, a lo largo de estos cuatro lustros que hoy celebramos, con la apertura de
El Yeyo, ha sido una incansable y frenética carrera que ha transcurrido no exenta de dificultades y obstáculos que gracias al tesón, perseverancia, constancia, firmeza y empeño, de esta insaciable pareja y su equipo, han ido salvando. A cuyo recorrido se fueron sumando de forma progresiva sus respectivos vástagos encabezado por Dieguito, que actualmente es quien lleva las riendas del negocio en
el Yeyo, junto con sus hermanos.
Por lo que no puedo por menos desde aquí expresar mi más profunda felicitación a estos dos buenos amigos por ese 46 aniversario de boda y por esas importantes iniciativas que han emprendido como, entre otras muchas, la puesta en marcha de celebraciones
Yeyo hace hoy 20 años. Felicidades por tanto, a cambio de tan poco, queridos amigos.