La imagen de la Virgen de las Lágrimas recorrió en la noche del sábado las calles de la feligresía de la iglesia Mayor parroquial, con un nutrido grupo de hermanos.
Salió ya con la noche avanzada, a las 22.15 horas, debido a las celebraciones que se desarrollan en la iglesia Mayor por parte de las comunidades neocatecumenales, de forma que retrasó la salida prevista de 20.30 horas en el programa oficial del 125 aniversario fundacional, hasta las 22.15 horas.
Con la calle Real casi muerta, por la falta de público, los alrededores de la iglesia Mayor estaban llenos de decenas de personas que esperaban la salida de la Virgen de las Lágrimas. Tras la apertura de las puertas, comenzaba la salida del cortejo, con la presencia del sacerdote Gonzalo Núñez Zaragoza.
El rosario recorrió la Plaza de la Iglesia, Capataz Nicolás Carrillo, Pérez Galdós, San Cristóbal, San Francisco de Asís, San Nicolás, San Servando, Jazmín, Jardinillo, Pérez Galdós, Capataz Nicolás Carrillo y recogida en la iglesia Mayor parroquial.
La deficiente iluminación de muchos tramos de calles hacía que fuera imposible ver la cara de la Virgen, que iba ataviada con un tocado marca y seña de la Virgen de las Aguas de la Hermandad del Museo, de Sevilla, aderezada por José Muñoz Moreno, bordador y vestidor.
La Hermandad de Columna suele celebrar el segundo domingo de mayo el rosario de la aurora con su titular, sin embargo, en esta ocasión y dada la celebración del 125 aniversario fundacional de la hermandad, se ha optado por un rosario de antorchas.
No faltaron en este rosario antiguos hermanos mayores o el presidente de la comisión del 125 aniversario fundacional de la hermandad.
Los hermanos precedían la parihuela portada por hermanos cargadores de Columna, y tras la parihuela con la Virgen, numerosos fieles que la seguían.
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