Los rocieros roteños tendrán un camino este año marcado por las inclemencias del tiempo. Las previsiones marcan agua hasta el jueves, y mañana es cuando la Hermandad de Rota iniciará su peregrinación hasta la aldea de Almonte, aunque la forma en que lo hagan dependerá mucho de lo que digan los cielos.
La Hermandad celebrará como es tradicional a partir de las 08:00 horas la Misa de Romeros en la Iglesia del Carmen, para luego tomar camino hacia Sanlúcar, donde el embarque de Rota está previsto para las 16:00 horas aproximadamente. La lluvia será la que decida si, como en años anteriores, la Hermandad recorrerá en procesión las calles de Rota hasta llegar a la Iglesia de la O y el Castillo de Luna, y realizar la tradicional parada en la Barriada de la Blanca Paloma, donde se reza una salve frente al pequeño monumento a la Virgen que se encuentra en esta barriada.
Viva Rota ha hablado con Francisco Gómez 'Suspiro', Hermano Mayor de la Hermandad del Rocío de Rota, que según los partes con los que cuenta, las lluvias fuertes pueden hacer su aparición a la hora de la salida. Todo está por decidir y será sobre la marcha como se decida todo, puesto que aunque algunos partes indican que la lluvia más fuerte será entre las seis y las ocho de la mañana de este martes, todo puede cambiar.
En principio, y tras la Misa, en torno a las 08:30/08:45 horas, se montará el Simpecado en la carreta y se iniciará camino, las lluvias indicarán si se hace por el centro como en años anteriores o si se toma directamente camino hacia Sanlúcar. Precisamente en la mañana de hoy está prevista una reunión del Hermano Mayor de la localidad vecina, responsable de las hermandades de Cádiz, con el 112, que analiza durante la jornada el estado de los caminos para determinar por dónde podrán discurrir las Hermandades, ya que este organismo es el responsable directo de la seguridad de las Hermandades durante el camino y en Doñana.
Rota hará el camino con unos 250 peregrinos, y unos 60 vehículos, entre coches y tractores. El número de caballos no se ha determinado puesto que dependerá del tiempo y de si los caballistas deciden peregrinar con su caballo o por el contrario hacer el camino en coche. Todo tendrá que irse decidiendo sobre la marcha, y las lluvias mandarán, aunque desde la Hermandad esperan tener un buen camino y cumplir con su objetivo anual, el de acudir a ver a la Blanca Paloma, llueva, nieve o truene.