La sesión de ayer, 29 de enero, brindó la oportunidad al municipio roteño de disfrutar de la única agrupación de la localidad en Cuartos de Final del concurso de agrupaciones carnavalescas de Cádiz, muy nuestro pesa por ese 'cajonazo' de la comparsa de las niñas. La chirigota de Rota, 'Los niños de Isabelita 2.0' volvieron a interpretar un repertorio alegre, con mucha comicidad y emotividad. Además, la chirigota nos brindó, y sobre todo al propio Antoñito Molina, uno de los momentos más memorables de este concurso para demostrar su buen hacer en el concurso.
La actuación comenzó con carcajadas por todos los rincones del teatro con esa entradilla adaptada a la más vigente actualidad: "Kiko Rivera, lo mismo te canta que te presenta el cartel de la Semana Santa". un juego de luces, una broma sobre la actual polémica en el sector cofrade y el público era todo suyo. Los espectadores quedaron rendidos con ese 'gag' inicial, demostrando la capacidad de esta agrupación de introducir elementos que acontecen hoy. La presentación continuaba en su línea dicharachera y animada. Esa música tan bailable provocó que el más rígido se meciera al son de estos Kiko Rivera. Los de cantora continuaron manteniendo el nivel y arrancaron la tanda de pasodobles con un primero reivindicativo porque como dijo uno de los integrantes de la agrupación, 'Suspi', "al Falla hay que venir a decir cosas".
Una vez tratado el tema de la censura en el carnaval, pasamos al momento más emotivo de su pase. El estupor fue máximo para una de las piezas más relevantes del grupo: Antoñito Molina. La agrupación, es decir, sus amigos, tenían preparada una sorpresa que a palabras del propio Molina "jamás voy a olvidar". Mientras Antoñito procedía a dar paso al nombre del pasodoble, Iván agarró a su amigo y le dijo "esto no lo cantes, escúchalo". Ahí, en ese preciso instante, como nos confesó a 7tv Rota, sabía lo que venía. Y es que todos ellos han insistido que no dejan de ser un grupo de amigos que vienen haciendo carnaval durante 15 años y con aparición en el concurso por varios años. Así, este grupo de amigos quiso rendir homenaje a uno de ellos, a aquel que tanto esfuerzo le supone por motivos laborales venir cada año a cantar al Falla. La ovación fue un estruendo. Los abrazos no cedían porque el concurso se detuvo a contemplar como un grupo de amigos se divierten haciendo carnaval.
La actuación mantuvo un nivel elevado, primer cuplé al tipo recuperando la relación maternofilial y un segundo cuplé a otra agrupación, dejando de manifiesto la capacidad de absorber la actualidad. Un popurrí muy animado con sus referencias constantes al personaje que traen y punto y final a una noche mágica. Un pase de Cuartos de Final exquisito donde primó el carnaval.
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