La Consejería de Salud y Bienestar Social de la Junta de Andalucía ha aumentado en 25 el número de plazas concertadas dirigidas a los menores que tutela en la provincia de Granada, con un total de 385 en el presente año. Así lo ha anunciado el delegado territorial del ramo, Higinio Almagro, quien ha presidido este jueves el acto de renovación de los acuerdos con las entidades colaboradoras con las que concierta plazas residenciales dirigidas a estos menores.
El acto ha reunido a representantes de 16 centros colaboradores que suman 335 plazas, a las que deben añadirse otras 50 plazas de los centros públicos existentes en Granada: Ganivet y Bermúdez de Castro, para dar cobertura a estos menores. La inversión realizada por la Junta de Andalucía en el mantenimiento de estas plazas residenciales ascenderá a 7,2 millones de euros durante el presente año 2013.
El modelo de acogimiento por el que aboga la Junta de Andalucía debe combinar la calidad técnica de la atención, con unas condiciones materiales óptimas de los centros. Desde esta doble perspectiva de calidad y calidez, el acogimiento residencial es considerado como una alternativa válida, que se utiliza cuando resulte más beneficiosa para el menor. El acogimiento residencial convive con otras fórmulas de adopción y acogimiento familiar.
El trabajo complementario de prevención del maltrato y el de los propios centros en la labor de retorno e integración familiar ha hecho que los pequeños menores de 6 e incluso 12 años sean cada vez menos en acogimiento residencial en la provincia granadina.
El actual mapa de recursos de atención residencial de menores en Andalucía y concretamente en Granada lo compone una serie de centros de titularidad tanto pública como privada. Por tanto, hay centros que son gestionados por asociaciones y otras entidades sin ánimo de lucro que colaboran con la Administración en esta materia desde hace años.
PROGRAMA DE ORIENTACIÓN E INSERCIÓN SOCIAL Y LABORAL
La Consejería de Salud y Bienestar Social de la Junta de Andalucía cuenta con un variado conjunto de programas como los de primera acogida, dirigido a menores que necesiten atención en tanto en cuanto se diagnostica su problemática concreta o los programas específicos de atención a la diversidad, a través de los cuales se atiende a menores cuyas necesidades exigen un abordaje diferenciado.
A ellos viene a sumarse uno nuevo, el programa de Orientación e Inserción Social y Laboral para jóvenes preferentemente entre 16 y 18 años de edad. "En la mayoría de estos casos hay pocas posibilidades de retorno al núcleo familiar de origen o de otras fórmulas de integración familiar, por lo que se encuentran con un elevado riesgo de exclusión social al alcanzar la mayoría de edad", ha señalado el responsable de Salud y Bienestar Social en la provincia.
Este programa, por tanto, tiene como objetivo fundamental facilitar el paso desde la adolescencia hasta la independencia de la vida adulta a través de actuaciones específicas que desarrollen su autonomía personal y fomenten su integración social y laboral. La principal característica definitoria del mismo es la especial intensidad con la que se trabajará la integración social y laboral, así como la normalización de los jóvenes.
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