Justo en ese momento en el que tu vida cambia. En el que da un vuelco. Justo en ese momento en el que esa persona especial aparece. En el que tu película romántica empieza a rodarse. Pero esta vez sí, la realidad supera a la ficción. Tú eres la actriz protagonista y todo lo que vives en primera persona, era lo que siempre habías soñado. A veces llega en el momento menos esperado, cuando menos lo buscas. Y de pronto tropiezas con esa persona que pone patas arriba tu día a día. Que hace que tengas un motivo más para sonreír. Que dibuja de color cada día gris. Que enciende de una chispa todos tus sentidos y que eriza la piel con tan solo un suspiro. El amor es así, inesperado, loco, sencillo. El amor es vida. Vida que decidimos compartir con quien elegimos. Caminando detrás o al lado de cada paso que da, contagiando de felicidad cada instante, siendo en cada beso, en cada caricia, en cada mirada. El amor no se puede explicar con palabras, porque es necesario sentirlo. Amor, ahora que estás, no quiero que te vayas nunca.
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