La autopsia realizada al cadáver del propietario del ferry 'Sewol' ha sido incapaz de determinar la causa del fallecimiento del magnate, que se encontraba prófugo desde la tragedia y para cuya captura las autoridades habían movilizado a miles de agentes.
Tras anunciar los resultados de toxicología y la autopsia, el Servicio Nacional Forense ha afirmado que "no se puede concluir la causa, ya que el cadáver estaba gravemente descompuesto", según ha informado la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
El cuerpo fue localizado el mes pasado en un campo de ciruelos cercano al lugar donde la Policía sospechaba que se estaba escondiendo Yoo Byung Un, cabeza de la familia propietaria del barco hundido. Las autoridades ofrecían casi medio millón de dólares de recompensa por Yoo, acusado de malversación, negligencia y evasión fiscal.
El cadáver fue localizado boca arriba, vestido con un abrigo y un sombrero, y en un avanzado estado de descomposición. Además, había varias botellas de alcohol alrededor del cuerpo, según las autoridades. Por el momento se desconoce cuándo y cómo falleció.
La Fiscalía surcoreana se disculpó el lunes por no localizar a Yoo, considerado el hombre más buscado del país, cuando anunció los resultados de las investigaciones preliminares. En su comparecencia, los representantes del Ministerio Público no hicieron mención alguna al cadáver sospechoso.
El ferry, de 6.825 toneladas, y que hacía la ruta desde la ciudad portuaria de Incheon hasta la isla turística de Jeju, se hundió frente a la isla de Jindo (suroeste). La mayoría de los pasajeros eran de nacionalidad surcoreana, aunque entre los fallecidos ya confirmados figuran al menos tres extranjeros.
El buque fue construido en Japón en 1994 y tiene 146 metros de eslora, 22 de ancho, pesa 6.325 toneladas y tiene una capacidad máxima para 921 personas, 180 vehículos y 152 contenedores.
El 'Sewol' naufragó en parte por la negligencia y la corrupción del Gobierno, según un informe oficial que adelanta también el inicio de procedimientos legales contra once funcionarios supuestamente corruptos.
El informe también pone en el punto de mira a la Asociación de Navegación Coreana, que no detectó los problemas de carga antes de que el buque zarpase rumbo a la isla de Jeju.
La Guardia Costera, por su parte, no mantuvo una comunicación adecuada con el 'Sewol' y cometió errores en la operación de rescate con los pasajeros, según la agencia oficial.
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