Publicidad Ai

Mundo

Una política surcoreana inicia una huelga de hambre por vertido de agua de Fukushima

Frente a la embajada japonesa en Seúl en protesta por el plan de Tokio de verter agua procedente de la accidentada central nuclear de Fukushima al mar

Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad Ai
  • Fukushima -

La líder del Partido de la Justicia, una formación surcoreana en la oposición, inició hoy una huelga de hambre frente a la embajada japonesa en Seúl en protesta por el plan de Tokio de verter agua procedente de la accidentada central nuclear de Fukushima al mar.

La líder del bloque liberal, Lee Jeong-mi, dijo en una rueda de prensa celebrada delante de la embajada para anunciar el inicio de su huelga de hambre que ha tomado esta decisión porque el Gobierno del presidente conservador Yoon Suk-yeol "se mantiene en silencio en un momento en el que el vertido de agua es inminente".

"No soportamos ver a nuestro gobierno aceptar las mentiras del Gobierno japonés", afirmó Lee, que acusó a Yoon y su Ejecutivo de ser "un loro" que repite todo lo que dice Tokio, en declaraciones que recoge la agencia Yonhap.

Lee aseguró que su partido podría trabajar con grupos ciudadanos nipones y otras fuerzas de la oposición para convencer a los japoneses de que se opongan al plan y, en última instancia, presionar a Tokio para que reconsidere verter el agua en el océano.

El Gobierno japonés y la operadora de la central de Fukushima, TEPCO, tienen previsto comenzar en las próximas semanas la descarga al Pacífico de en torno a 1,32 millones de toneladas de agua contaminada de la central, tras ser procesada para retirarle la mayoría de los isótopos radiactivos (salvo el tritio) y mezclada con agua marina.

Tokio sostiene que el vertido tendrá una concentración de tritio muy por debajo del tope legal establecido para el agua potable.

Por su parte, el vicedirector de la Oficina para la Coordinación de Políticas del Gobierno surcoreano, Park Ku-yeon, quiso recordar que ya se barajaron distintas posibilidades sobre qué hacer con las toneladas de agua -usada para enfriar los reactores dañados y la que se cuela en los mismos a través del subsuelo- que se va acumulando y a diario y debe almacenarse en tanques en el recinto de la central y que la decisión se tomó hace una década con el apoyo del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA).

"El método para verter el agua al océano se adoptó como la alternativa más realista tras tomarse en cuenta los precedentes científicos y la seguridad", explicó Park.

Una encuesta realizada por la Federación Coreana de Movimientos medioambientales muestra que el 85 % de los surcoreanos se oponen al vertido de agua al Pacífico.

El plan también ha generado también un fuerte rechazo en China y otros países de la región.

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN