El aeropuerto londinense de Heathrow, uno de los aeródromos con mayor tráfico de Europa, anunció este jueves que detendrá los vuelos durante diversos periodos el próximo lunes para respetar el silencio que guardará el Reino Unido durante el funeral de Estado de Isabel II.
Ningún avión recibirá permiso para despegar ni aterrizar en el aeropuerto, a unos 20 kilómetros al oeste de Londres, desde quince minutos antes hasta quince minutos después del término de la ceremonia religiosa en la abadía de Westminster, cuando están programados dos minutos de riguroso silencio nacional.
Se evitará así los habituales pasos de aeronaves sobre el centro de la capital británica en dirección al aeropuerto, que puede acoger hasta un aterrizaje por minuto.
Entre las 13.45 y 14.20 hora local (de 12.45 a 13.20 GMT), cuando el féretro de la reina saldrá del templo en un cortejo fúnebre, tampoco se operarán vuelos, mientras que el ritmo de despegues se ralentizará entre las 16.45 y 21.00 hora local (de 15.45 a 20.00 GMT), para minimizar el ruido en el castillo de Windsor, a escasos 8 kilómetros, donde se enterrará a la reina.
"Como señal de respeto, las operaciones hacia y desde el aeropuerto estarán sujetas a los cambios apropiados para evitar ruidos molestos en determinadas localizaciones en momentos concretos del lunes", señaló un portavoz del aeropuerto.
En total, en torno al 15 % del tráfico aéreo de Heathrow en una jornada habitual quedará interrumpido.
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