Si ganamos, desbloquearé el Gobierno, incluso con el PSOE”. Y continuaba….”yo sí que puedo decir que me comprometo a que, si tengo un escaño mas que Pedro Sánchez, desbloquearía la situación política en España”. Son declaraciones de Pablo Casado. Albert Rivera ha dicho recientemente algo parecido. Ahora todo el mundo desbloquea. Por eso vamos a segundas elecciones: todo el mundo bloqueó. La realidad es una enmienda a la totalidad a todas estas manifestaciones.
Si Casado o Rivera ganan -dicen ellos- se llamarán mutuamente para formar gobierno de forma inmediata. Rivera lo dice pero ya es un lugar común hasta en los colegios de primaria el conocimiento de que no tiene ninguna posibilidad de ganar. De ser el niño bonito de las encuestas y del mundo empresarial ha pasado a desahuciado de ambas entidades. Su lucha por la primogenitura de la derecha ha fracasado estrepitosamente. El PP lo ha desbordado. La política de Rivera de entregar en todos los sitios que ha podido el poder al PP ha tenido el efecto normal. La gente ha preferido el original a la copia. Si donde ha podido formar gobierno lo ha llevado a término auxiliando al Partido Popular - en Andalucía, en Murcia, en Castilla-León, en el ayuntamiento y la Comunidad de Madrid- es lógico que el desplazamiento del elector afín a esa línea política lo haga votando al PP directamente. Porque detectaron esa posibilidad se fueron todos los críticos y, entre ellos, algunos de los fundadores del partido naranja. La política anterior de Rivera giraba en su capacidad de lograr acuerdos o pactos de gobierno a un lado y otro del arco político. Desde el momento en que se empecinó en vetar a Pedro Sánchez y meter en un gueto político al PSOE las cosas le han ido mal. Ahora lo trata de corregir con operaciones de saltimbanqui que nadie cree.
El PP vive momentos preelectorales felices por el desmoronamiento de Ciudadanos. Ciudadanos lavó su imagen y el partido conservador ha sacado todo el provecho. Quiere un desbloqueo, si es el partido que gana, sólo si es el partido triunfador. Si gana otro, aplicará el bloqueo…porque para eso es la alternativa de gobierno. El ancho del embudo. Lo que no dice es que sus triunfos siempre lo son porque recibe el apoyo de Vox. Ahí no hay remilgos, ni reticencias, ni escrúpulos democráticos.
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