Una mujer de 50 años y de origen magrebí ha sido detenida por la Guardia Civil en el aeropuerto de Málaga-Costa del Sol cuando se disponía a viajar hacia Tánger y tras descubrirse que portaba 2,7 kilogramos de cocaína adheridos a su cuerpo.
La actuación se produjo cuando se observó cómo la pasajera mostraba gran nerviosismo al manipular su equipaje sobre las cintas de la máquina de rayos X, ha informado este martes la Guardia Civil en un comunicado.
A su paso por el arco detector de metales y al provocar la alarma, el vigilante de seguridad se dispuso a efectuarle el correspondiente control, momento en que la pasajera, sin motivo justificado, comenzó a echarse hacia atrás, y al tocarle la cintura notó que tenía un objeto duro a su alrededor.
Por ello, los guardias civiles allí presentes procedieron a la identificación de la pasajera y a su traslado a dependencias oficiales, donde se le hizo una inspección en la que le fueron detectados catorce envoltorios asidos a la cintura que contenían una sustancia blanquecina que dio resultado positivo en cocaína en el drogatest.
La sustancia intervenida arrojó un peso de 2,7 kilogramos, por lo que se procedió a la detención de esta persona, como presunta autora de un delito contra la salud pública.
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