El sector pesquero es en ocasiones criticado por el impacto de su actividad en el mar, aunque su trabajo también ofrece beneficios como el cuidado del medio ambiente gracias al reciclaje, que hacen de forma desinteresada los pescadores de arrastre del Puerto de Caleta de Vélez (Málaga).
Esta labor, que realizan diariamente desde hace años los pescadores de arrastre de este puerto, se ha formalizado con la firma de un acuerdo con la organización Mares Circulares, que lucha para velar por la limpieza de los fondos marinos con el apoyo de los arrastreros.
La patrona mayor de la Cofradía de Pescadores de este Puerto, Mari Carmen Navas, ha explicado a Efe que recibió esta propuesta para que los pescadores de arrastre que lo desearan ayudasen con la recogida de residuos durante su actividad normal, una acción que "ha formalizado lo que muchas embarcaciones ya hacían de forma desinteresada".
Navas ha señalado que este proceso comienza "con la jornada laboral de estos pescadores de arrastre que, cuando ven que se llena el copo, lo vacían y apartan los residuos recogidos de la pesca", una carga que almacenan hasta llegar a puerto para depositarla en los contenedores facilitados para su posterior reciclaje.
"Desde septiembre realizan esta actividad diez embarcaciones de arrastre que, aproximadamente, traen al puerto de media 50 kilos de basuras al día", ha destacado Navas, que ha explicado que gran parte de estos residuos "son terrestres, es decir, no provienen de las embarcaciones, sino de lo que los particulares arrojan al mar".
Ha reconocido que, aunque esta actividad no conlleva ninguna retribución económica para los pescadores, "ha captado el interés de otras embarcaciones que quieren adherirse a este plan de reciclaje de residuos" y participar para la limpieza de los fondos marinos hasta finales de 2019, cuando concluye el proyecto.
Este plan, que cuenta con la colaboración de Coca-Cola para dividir los residuos recogidos y convertirlos en útiles reciclados, está activo en varios puertos de la península, entre los que destaca el de Caleta de Vélez, ya que "es el que más residuos está recogiendo del mar con menores embarcaciones", ha señalado Navas.
Ha recordado que los objetos más raros que han llevado a puerto los pescadores de arrastre han sido "un coche de juguete, una lavadora o una torreta de ordenador, residuos terrestres que contaminaban el fondo del mar", un espacio que "hay que cuidar entre todos".
El mar y sus fondos, altamente amenazado por el hombre por la falta de conciencia en cuanto al reciclaje, cobra de esta forma nuevo vida gracias a la labor desinteresada de los pescadores de arrastre.
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