El próximo 12 de agosto dará comienzo el abono taurino malagueño. El primero de los ocho festejos será una corrida de Lagunajanda en la que Manuel Jesús ‘El Cid’ abre un cartel en el que estará acompañado por Paco Ureña y José Garrido. El diestro del municipio sevillano de Salteras recuerda que las vivencias en La Malagueta “han sido preciosas” sobre todo en sus inicios. “Málaga es una afición muy torista, muy entendida, muy buena. Dios quiera que la empresa nueva vuelva a levantarla tal y como estuvo hace años, como la tenía Martín Lorca, que fue el precursor de que Málaga tuviera una Feria. Ojalá vuelva a suceder eso porque se merece ser una feria de éxito”.
Reconoce que siempre es mejor torear los días de en medio pero no le importa torear el primero “porque el que primero pega, pega dos veces” y además para él la afición malagueña siempre le ha esperado “con los brazos abiertos y siempre he intentado corresponderle”.
Hace menos de dos meses, el 8 de junio, un toro de Adolfo Martín lo cogía de forma grave en la madrileña plaza de Las Ventas. “Iba a por todas y no pude pegar ni una tanda”, lamenta el diestro que en 2018 cumple la mayoría de edad como matador de toros, después de doctorarse precisamente en la plaza venteña de la mano de David Luguillano y en presencia de Finito de Córdoba. Ahora, se encuentra “totalmente recuperado” y hace un balance muy positivo de las sensaciones en la cara de los toros después del percance y ya piensa en Málaga tras su compromiso del sábado pasado en Tudela, donde salió a hombros acompañado de Manuel Escribano.
“Tengo muchas ganas e ilusión”. Si se le pregunta por situación mental tras la cornada responde que “mejor que antes”. “Hay cornadas que te hunden y otras que te fortalecen, como ésta. Nadie quiere que lo cojan pero si te coge tienes que analizar el porqué y es verdad que cuando lo asimilas te fortalece mucho. Creo que en dos meses he ganado mucha madurez y ahora toca demostrarlo en las plazas”.
