El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha confiado en que, "por lealtad hacia la ciudad y hacia los vecinos", la Consejería de Fomento y Vivienda y la concesionaria acepten su propuesta de que sea la Cátedra de Gestión del Transporte de la Universidad de Málaga (UMA) la que determine qué opción es la más viable para conectar la zona de El Corte Inglés y el Hospital Civil: si el metro en superficie o el autobús, que defiende el regidor. "Espero tener ese criterio técnico y que no haya una imposición política o dogmática", ha manifestado.
De la Torre ha asegurado a los periodistas que acude a la reunión de este lunes, clave para garantizar la viabilidad financiera del metro, pendiente del crédito del Banco Europeo de Inversiones (BEI), movido por "el mejor ánimo de acuerdo", pero también "de defensa de los intereses de la ciudad y de los malagueños", agregando que por parte municipal "no queremos empantanar el tema".
Así, planteará a la Consejería de Fomento y a la concesionaria una propuesta de nuevo convenio de colaboración que "dé respuesta" a la situación actual, así como que los expertos de la Cátedra de Gestión del Transporte de la UMA elijan la opción más viable entre el tranvía o el metrobús, una solución ésta última "más flexible desde el punto de vista técnico, más barata desde el punto de vista económico y de menos rechazo vecinal".
El regidor del PP ha defendido la independencia de la Universidad, una institución que "no depende del Ayuntamiento, sino de la Junta". No obstante, las actividades de la Cátedra de Gestión del Transporte son patrocinadas por la Empresa Malagueña de Transportes (EMT).
"Es una demostración de buena fe --ha señalado-- y esperamos que la otra parte tenga la misma disposición de aceptar lo que diga esa cátedra", que, "lógicamente, mirará el interés común, la relación coste-beneficio, la posibilidad, si hay ahorro hacia el Civil, de ir más lejos bajo tierra en la Alameda Principal...".
Ante la posibilidad de que su propuesta de dejar la decisión en manos de un comité de técnicos sea rechazada por la Consejería de Fomento, de modo que ésta "no quiera abrir el abanico a un análisis que se puede hacer en cinco días", De la Torre ha dicho que aceptaría el tranvía porque "no queremos empantanar el tema".
Además, si se diera esta situación, el regidor malagueño confía en contar con el apoyo del Gobierno andaluz para "convencer" a los vecinos de Bailén-Miraflores, que muestran "una oposición significativa" al tranvía.
Si se permite el análisis y los técnicos dicen que el tranvía es la mejor solución, "ahí estaremos", pero "si establecen que es el metrobús, me gustaría encontrar esa misma disposición por parte de la Junta de Andalucía", ha aseverado.
"MIEDO" DE LA JUNTA
Y es que, según ha expuesto, "si están tan convencidos de que la solución buena es la del tranvía, dejen que los expertos lo ratifiquen", opinando que "quizá no estarán tan convencidos cuando parece que tienen miedo a que los técnicos puedan decidir". Además, ha aclarado que el autobús que propone y que serviría de lanzadera "sería gestionado por la EMT y los ingresos serían para el metro".
El primer edil ha hecho hincapié en que la premura para cerrar un acuerdo y garantizar la viabilidad financiera del metro "está motivada por una situación de la que el Ayuntamiento es ajeno absolutamente". "Miren ustedes hacia la Autonomía o la concesionaria en relación con esos retrasos, pero no hacia el Consistorio", ha apostillado.
Ha recordado que en la reunión del pasado 27 de septiembre con la presidenta de la Junta, Susana Díaz, con la que no ha podido contactar durante este fin de semana, se incidió en la necesidad de que hubiera "el máximo consenso vecinal" con las modificaciones introducidas, en referencia a llevar el metro soterrado hasta la mitad de la Alameda Principal y en superficie hacia el entorno del Hospital Civil.
NUEVO CONVENIO
Además, De la Torre subrayó entonces y ha reiterado este lunes la necesidad de hacer un nuevo convenio de colaboración con la Consejería de Fomento sobre la obra del suburbano, adaptando el firmado en 2003 a los numerosos cambios producidos, ya que "lo que se ha hecho a lo largo de estos años poco tiene que ver con lo previsto". Una cuestión que ratificó el pasado 10 de octubre en la comisión mixta de seguimiento del metro.
"En defensa de los intereses de los ciudadanos de Málaga, la cantidad que el Ayuntamiento aporte al funcionamiento del metro tiene que ser fruto del análisis de la tarifa técnica que había prevista inicialmente, establecida en 1,94 euros y que subió luego en acuerdos bilaterales entre la Junta y la concesionaria", ha indicado.
El regidor ha dejado claro que "en la aportación de alrededor de siete millones de euros al año debe estar incluido el esfuerzo que puede suponer para el Ayuntamiento compensar a la EMT en sus cuentas por los efectos de la entrada del metro". "De este tema se ha hablado muy poco, ha faltado mucha transparencia, y ya es hora de que se hable", ha concluido.
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