"La obligó reiteradamente", precisan las acusaciones, que indica que los hechos presuntamente ocurrieron desde 2021 a febrero de 2023.
La acusación particular ha elevado la petición de pena a quince años de prisión para el hombre acusado de presuntamente agredir sexualmente a la hija de su mujer durante varios años, primero en el domicilio familiar que tuvieron en Cuba y después en territorio español.
El abogado que representa a la familia, Andrés Francisco Pérez Plaza, ha indicado a EFE que para esclarecer las repercuciones de las agresiones sexuales ha solicitado los correspondientes expedientes de las dos psicólogas que la han tratado desde el inicio y la que la trata en la actualidad.
Además de las agresiones sexuales que sufrió la menor, según los escritos del fiscal y la acusación particular, a los que ha tenido acceso EFE, en tres ocasiones fue violada y en los partes médicos se describen lesiones y erosiones compatibles con el relato de conclusiones de las dos acusaciones.
Pérez Plaza ha lamentado que debido a dichos hechos la menor sufre un trastorno de estrés postraumático, tiene un estado temeroso y llanto reactivo.
El fiscal, al igual que la acusación, mantienen que la menor sufrió la agresión sexual desde que tenía 11 años y el procesado supuestamente aprovechaba los momentos en que su mujer estaba trabajando o cuando se encontraba en el baño.
"La obligó reiteradamente", precisan las acusaciones, que indica que los hechos presuntamente ocurrieron desde 2021 a febrero de 2023.
El acusado convivió en el domicilio familiar primero en Cuba y después en territorio español y además de agredirla sexualmente la violó en varias ocasiones.
El letrado Pérez Plaza ha pedido que además de la pena de prisión indemnice a la menor con 150.000 euros por las lesiones y daños morales causados e irreparables y que se le prohíba durante 20 años aproximarse a la menor y su madre, a su domicilio y lugar en el que se encuentre en un radio de 1.500 metros y no pueda comunicar con las mismas ni por terceros.
La acusación particular mantiene que los son constitutivos de un delito de agresión sexual agravado y el fiscal también ha pedido que se le prohíba aproximarse a la menor, a su domicilio y lugar en el que habitualmente se encuentre en un radio no inferior a 500 metros, a lo que suma la prohibición de comunicar con la misma durante veinte años y doce años de prisión.
Por el daño moral, las lesiones y secuelas, el ministerio público ha pedido que indemnice a la menor con más de 24.000 euros.
El acusado se declara inocente de los hechos y su defensa en el escrito de conclusiones provisionales, al que ha tenido acceso EFE, mantiene que su cliente no ha participado en dichos hechos y pide la libre absolución.