La Casa Invisible, representada por la Fundación de los Comunes, se enfrenta a un revés judicial tras el fallo del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo Nº4 de Málaga, que desestimó el recurso interpuesto contra el desalojo del edificio municipal okupado desde 2007. La sentencia respalda al Ayuntamiento de Málaga, que busca recuperar la posesión del inmueble para su rehabilitación, rechazando la concesión directa y gratuita del espacio al colectivo, argumentando acciones al margen de las estatutarias de la Fundación de los Comunes.
La Invisible alega arbitrariedad administrativa y vulneración de la doctrina de los actos propios, así como falta de motivación por parte del consistorio, defendiendo el "derecho a la ciudad". Sin embargo, la jueza desestima estos argumentos, respaldando la decisión municipal y destacando una abundante documentación que sustenta el rechazo del consistorio a la cesión del espacio.
La sentencia no es firme, lo que permite a La Invisible apelar la decisión en un plazo de 15 días. El colectivo anuncia su intención de recurrir ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, calculando en errores y omisiones de pruebas, así como en una falta de motivación en la resolución judicial.
Recurrirán la sentencia
La abogada Amanda Romero, representante legal de La Casa Invisible, anunció en rueda de prensa que presentarán un recurso de apelación ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. Romero expresó su respeto por la decisión judicial, pero destacó su intención de cuestionar la motivación, congruencia, racionalidad y conclusión de la sentencia, argumentando errores y omisiones de pruebas documentadas en el expediente del caso.
Romero criticó la sentencia por respaldar el rechazo del Ayuntamiento de Málaga a la cesión gratuita del espacio debido a supuestas irregularidades y un "uso indebido" del edificio, alegando que La Invisible entregó una memoria de actividades culturales al Ayuntamiento, requisito para ser declarada de Utilidad Pública en 2016.
Florencio Cabello, miembro del colectivo, recordó que el patio de La Invisible albergó actividades del MaF, Málaga de Festival, en 2018, lo que cuestiona la seguridad del espacio alegada por el Ayuntamiento.
Romero defendió que La Invisible ha colaborado en todo momento con los técnicos de Urbanismo, salvo en una ocasión de tensión con el Ayuntamiento que retrasó una inspección. Aclaró que el recurso de apelación no suspende el desalojo, pero abogó por el derecho a la tutela judicial efectiva.
No obstante, el colectivo apela al principio de la tutela judicial efectiva para evitar una ejecución unilateral del desalojo, abogando por una salida negociada al conflicto con el Ayuntamiento y apelando a un diálogo constructivo como alternativa al uso de la fuerza y la violencia.
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