Se espera que la bajada de temperaturas que se produce estos días favorezca la desaparición de puntos calientes
La mayor parte de las 4.860 hectáreas recorridas por las llamas en el incendio forestal de Pujerra (Málaga) es terreno privado (el 94,4 por ciento), ya que la zona forestal pública es de 270 hectáreas y en cuanto al tipo de vegetación destaca el arbolado (2.743 hectáreas) seguido del matorral (1.810 hectáreas).
Estos son algunos datos del informe provisional sobre daños ocasionados por este fuego que ha trasladado al Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible.
También se han visto afectados pastos y áreas agrícolas y de otros usos en este incendio, iniciado el pasado 8 de junio y controlado una semana después y en cuya extinción han participado hasta este miércoles más de 3.300 efectivos del Plan andaluz contraincendios Infoca, 81 de ellos agentes de Medio Ambiente, en distintos turnos.
Han contado con 142 vehículos terrestres y respecto a los trabajos desde al aire, hasta la declaración del incendio como controlado, se realizaron 234 misiones aéreas con 22 medios aéreos.
A este operativo se sumaron también 233 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME), que se trasladaron hasta la zona incendiada con 81 vehículos de diverso tipo.
Dos dotaciones del dispositivo Infoca continúan trabajando en la extinción y la existencia de puntos calientes obliga a mantener una labor de vigilancia que se realiza con un vehículo autobomba, un retén de bomberos y un agente de Medio Ambiente en la zona norte y otra dotación de las mismas características en la parte sur.
Se espera que la bajada de temperaturas que se produce estos días favorezca la desaparición de puntos calientes y que, entonces, pueda sobrevolar la zona el dron del Infoca a lo largo de todo el perímetro para que, con su cámara térmica, analice si se han sofocado por completo tales puntos.
La extinción de este incendio es especialmente complicada debido a la orografía, ya que se trata de un terreno abrupto y con una arboleda bastante densa, así como a las condiciones climáticas registradas en la zona.
Estas dificultades, añadidas a la ya ardua tarea de luchar contra las llamas, causaron que tres bomberos forestales del Plan Infoca resultaran heridos con quemaduras de diversa consideración durante su trabajo.
A falta de analizar con detalle el terreno cuando se apague por completo el fuego, la superficie recorrida por las llamas ronda las 4.860 hectáreas de siete términos municipales malagueños (Benahavís, Estepona, Faraján, Igualeja, Jubrique, Júzcar y Pujerra).
Los servicios de emergencia procedieron de forma preventiva al desalojo de cerca de 2.000 vecinos de la localidad de Benahavís en los primeros momentos.
