¿Hasta cuándo y hasta dónde estamos dispuestos a soportar los andaluces que se mofen de nosotros en cualquier campo? Si atrás dejamos aquellos calificativos peyorativos sobre nuestro nivel cultural, nuestros parados o expedientes académicos; si atrás dejamos los tópicos arrastrados durante décadas de panderetas y vagancia; si atrás dejamos tantas y tantas cosas que sirvieron para zarandear nuestro orgullo e historia… ahora tenemos que soportar que desde una televisión de audiencia nacional se mofen e insulten nuestra singular forma de celebrar y sentir la Semana Santa.
Señores de la Sexta. Señores que estáis al mando de ese programa llamado “Así nos va”. Señores presentadores, que tenéis nombres y apellidos…sí, me dirijo al señor Florentino Fernández y a la señora Anna Simón… ¿De verdad creen que todo vale para conseguir audiencia y arrastrar las risas bobaliconas de sus espectadores? Grave error.
Si dudosa era la cuota de pantalla de su cadena o su programa…como se dice por esta bendita tierra, “la han cagado”. No todo vale a través de la pantalla. Insultar a una gran parte de la población andaluza mediante sus comentarios sobre nuestra Semana Santa no es válido ni ético. No es válido, porque con sus menosprecios y burlas se desmerecen a ustedes mismos como profesionales del periodismo que debieran ser. No es ético…porque para hablar de nuestras tradiciones, costumbres, creencias y, sobre todo de nuestros sentimientos, hay que tener muy limpia la boca y no arrastrar pasado alguno.
No todo vale, vuelvo a insistir, aunque crean o tengan la certeza de que hacer chistes a costa nuestra no tiene repercusión alguna. Sepan que quizás el problema radique en que no estén ustedes totalmente preparados para asimilar una cultura de tan tamaña amplitud.
Debe resultar difícil para ustedes, y lo comprendo nada más verlos, entender la raíz y evolución de tan majestuosa celebración cristiana por estas tierras del sur de España. Créanme que lo comprendo. Comprendo, tras analizar sus carreras profesionales, que se les pueda escapar que esos “trozos de madera que sacamos de paseo”, como ustedes califican, lleguen a significar mucho más para nosotros que para lo que sus ojos puedan alcanzar jamás a ver. Créanme que lo comprendo.
Pero ¿desean también que comprenda que se rían de nuestros mayores y de sus sentimientos a través de las entrevistas que les realizaron en el citado programa? ¿Quieren que comprenda que se cachondeen de nuestro fervor y sentimientos? Pues va a ser que no, pero les hago una propuesta: como esta muy de moda eso de ofender al creyente y a la religión, ¿por qué no hacen un programa especial insultando a otras creencias que todavía se encuentran un poco más al sur? ¿Miedo quizás? Créanme que lo comprendo. Insultar al que sigue el patrón del que puso la otra mejilla, debe resultar de lo más fácil, pero en cambio atacar a otros…
Y si hablamos de tradiciones, quizás resulte también un pelín más difícil y espinoso hacerlo con según qué comarca, pero si se trata de hablar de las tradiciones andaluzas, al río a por tortas. En fin, que espero una disculpa pública cuanto antes o que, de no haberla, se pierdan en el limbo de los programas basura olvidados en el tiempo. Y ahora me despido de ustedes porque quedan menos de trescientos cincuenta días para el Domingo de Ramos. Mi corazón se acelera, y gracias a Dios, así nos va…pero de bien, aunque a ustedes les cueste entender las lágrimas derramadas por los que lloramos cuando Cristo y su Madre dejan de pasear por nuestras calles.