Alicia Gavilán y Jesús Guerra son un matrimonio de enfermeros jerezanos que lleva ocho años viviendo en la ciudad francesa de Toulouse. Los 1.350 kilómetros que los separan de su tierra nunca han sido un inconveniente para que cada año hayan podido disfrutar de su cita obligada con el Real. Hasta que llegó la pandemia. Con estos antecedentes, estaba claro que este 2020 no iban a quedarse sin pisar una caseta de Feria, aunque fuera en el salón de casa. Y así ha sido. Pero es que la cosa se ha ido animando tanto en las últimas dos semanas, que al final han acabado desplazando literalmente los muebles del salón para dar espacio a la peña "Confí de Fuá", la caseta nº 12 del Real de su piso, en la que no falta ni un perejil.
“Me daba mucho coraje porque no tenía nada aquí: ni abalorios, ni mantoncillos, ni el traje de gitana...pero cuando Jesús al bajar la basura se encontró con una caja de un frigorífico, lo vimos claro y se nos ocurrió montarla en casa”, explica Alicia a Viva Jerez. Ya tenían parte de la “estructura” para levantar la fachada de su caseta. Una vez que habían asumido que no habría Feria, decidieron tomárselo con humor y dejar la nostalgia para otros tiempos. El resto vino solo.
En Toulouse es casi misión imposible conseguir farolillos, así que para decorarla tiraron de la imaginación y recurrieron a globos rojos en una composición perfectamente estudiada, y en la que no faltan ni las tradicionales macetas con claveles rojos realizadas con cartulina y papel de cebolla, mientras que un colorido mantel hace las veces de cortina. A estos adornos hay que sumar la lista de precios de la carta de bebidas y comidas, que incluso han inflado, y hasta el cartel de “Hay caracoles”.
Está tan conseguida “que parece real”, señala esta enfermera, orgullosa, que atiende a este periódico “dentro de mi caseta” y después de haber cogido varios días la Feria “por derecho” aprovechando que coincidían en casa por los turnos, y eso que aún les queda semana. Alicia pensaba que este año no lo diría, pero es que ha llegado a pronunciarle a su pareja la típica frase del jartible de la Feria: "la última sevillana y nos vamos. Nos vamos al lado, a dormir, claro”, relata entre risas.
Con una caseta tan currada, con cuyo nombre hacen un guiño a Francia, el confinamiento y la canción de José Mercé, su paisano que tanto escucha “en los días tontos” cuando tiene morriña de su tierra, tampoco podía faltar el menú típico de Feria presidiendo su mesa, con vino Tío Pepe, pimientos fritos, tortilla y marisco. Pero es que en este domicilio francés, además de preferia, han llegado a recrear el encendido del alumbrado, que también han instalado trasladando las luces que decoran su terraza, con el murmullo y los aplausos previos incluidos, y hasta situaciones típicas que se repiten en la Feria a lo largo de la semana. Un simpático vídeo, el de la recreación del alumbrado, del que se hizo eco Radio Jerez, al igual que de esta historia, y que esta pareja ha difundido desde Francia entre sus familiares y amigos “para reírnos y poner un poco de chispa, que después de tanto tiempo de confinamiento la gente necesita un poco de alegría”, explica la joven, a la que le consta que sus vídeos han llegado incluso a Chile.
Afortunadamente, la pandemia del Covid-19 ha estado “bastante controlada” en esta localidad francesa y finalmente el brote que se esperaba no ha llegado, por lo que los dos no han sufrido más de la cuenta la presión de la crisis sanitaria en el hospital donde trabajan.
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