El Ayuntamiento de Jerez, a a través de la Delegación de Urbanismo, avanza en el convenio en el que llevan trabajando más de un año para promover conjuntamente la integración urbanística de suelos innecesarios para el servicio ferroviario pero que históricamente están integrados en la ciudad. Según apuntan fuentes municipales, el acuerdo tendrá un carácter global pues el objetivo es que consigan dar salida a un paquete de parcelas de gran extensión distribuidas en distintos puntos del término municipal, pero antes deberán llegar a un buen entendimiento económico a la hora de ceder o mantenerlos.
Entre las parcelas incluidas en este paquete que se está poniendo sobre la mesa en distintos encuentros celebrados en Sevilla y Cádiz, figuran determinados suelos de la zona del río Guadalete en los que el Ayuntamiento de Jerez estaría interesado para su conversión en espacio peatonal en su proyecto de regeneración de este enclave y el talud de la zona sur, en el entorno de las obras de reurbanización de La Hoyanca que el Gobierno local está ejecutando. De igual manera, también están incluidos en este convenio terrenos por Entre Vías, en la calle Oro, y la calle Santa Jesusa, en San José Obrero, donde hay un tramo con una vivienda propiedad de Adif que lleva años abandonada y se ha convertido en un foco de infección al ser punto de encuentro de okupas, familias conflictivas y hasta por haber llegado a albergar animales de granja. En este sentido, la finalidad pasa por derribar por fin este inmueble para habilitar en la zona un parque infantil.
De igual manera, el convenio también recogería la eliminación de las barreras arquitectónicas (levantamiento del acerado, invadido por la maleza, falta de rebaje de los bordillos, lo que provoca caída entre los residentes, de edad avanzada).
Aunque no hay plazos, las mismas fuentes municipales consultadas confirman que el convenio para “dar solución” a muchas de estas parcelas repartidas por Jerez está muy avanzado, por lo que en breve podría haber buenas noticias para poder empezar a recepcionar terrenos y meterles manos después de décadas.
Un muro junto a las vías del tren
Dentro de las obligaciones de ADIF también está el mantenimiento de los suelos de su propiedad, y más si se trata de espacios laterales de las vías del tren y por razones de seguridad. Por esta razón, desde hace varias semanas ADIF levanta un muro para habilitar una valla paralela a la vía que dé más seguridad en la zona de Palos Blancos. Una actuación que responde a una reivindicación histórica de la asociación de vecinos de Palos Blancos, cuyos pisos se ubican justamente en frente de un tramo en el que la vía del tren no está elevada pese a estar protegida, eso sí, por mamparas que cumplen una labor de prevención que en ocasiones no funciona por culpa del vandalismo. El colectivo vecinal aplaude una intervención de la que se beneficiarán todos pero especialmente los residentes
de las calles Antares y Pilar Paz Pasamar y que responde a uno de los compromisos de la entidad pública.
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