La Hermandad de la Piedad ha solicitado formalmente al Obispado la preceptiva autorización para trasladar a su titular mariana a la basílica de la Merced y celebrar un triduo de carácter extraordinario. Los cofrades del Calvario quieren de este modo unir el 300 aniversario de la bendición de la Virgen de la Piedad al octavo centenario de la Orden Mercedaria.
La solicitud no es caprichosa por cuanto conviene recordar que la Hermandad de la Piedad tuvo su origen en la basílica de la Merced, desde donde posteriormente se trasladaría a la capilla del Calvario. No hay que dejar tampoco de lado la semejanza que existe entre ambas advocaciones, históricamente vinculadas a la redención de cautivos.
La Hermandad de la Piedad ya había expresado públicamente su voluntad de sacar en procesión extraordinaria a su dolorosa coincidiendo con el 300 aniversario de su bendición. Sin embargo, el decreto promulgado por monseñor Mazuelos en 2013 contempla que este tipo de salidas se enmarque únicamente en los aniversarios fundacionales de las hermandades y no en otro tipo de efemérides, como pudiera ser la bendición de la imagen.
De ahí que la Hermandad de la Piedad haya vinculadoel aniversario de su dolorosa al Jubileo Mercedario, encontrándose a la espera de la oportuna respuesta del Obispado.
Sobre el 1 de noviembre
La idea de la cofradía del Viernes Santo es que su titular regrese a la capilla del Calvario el jueves 1 de noviembre, solemnidad de Todos los Santos. Con anterioridad se habría celebrado un triduo en la basílica de la Merced, templo al que la imagen habría sido previamente trasladada.
El Jubileo Mercedario va a propiciar también que la Virgen del Carmen se haga presente en la basílica de la patrona el lunes 16 de julio en el marco de su procesión anual, que este año prolongará su recorrido de manera extraordinaria.
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