La existencia de estos náufragos se basa en el testimonio aportado por los 22 supervivientes que también ocupaban la embarcación. Entre ellos hay 11 hombres y 11 mujeres subsaharianos, una de ellas embarazada, que junto con otro varón fue conducida a un centro de salud tarifeño con síntomas de hipotermia.
En base a las informaciones recogidas por Cruz Roja de boca de los inmigrantes, todos los niños que se encontraban en la embarcación en el momento del naufragio -entre ocho y diez, en base a sus declaraciones- han sido dados por desaparecidos. A causa de esta tragedia humana, la mayoría de los supervivientes han requerido, además de la preceptiva asistencia sanitaria por hipotermia leve, una atención psicológica personalizada.
Para dar una idea de la magnitud de la tragedia, uno de los representantes de Cruz Roja relataba que un hombre le relató cómo vio a su mujer y a sus dos hijos pequeños desaparecer bajo las aguas del Estrecho.
Secuencia
El primer indicio de que podía haberse producido un nuevo naufragio en el Estrecho parte de una llamada al Servicio de Emergencias del 112 Andalucía hacia las 5.30 horas, según informaron fuentes de la Subdelegación del Gobierno. En base a las informaciones recibidas, el aviso se dio desde un teléfono móvil, y en él se informaba de la desaparición de un grupo de inmigrantes que había zarpado de Tánger y pretendía alcanzar las costas de Tarifa.
Salvamento Marítimo inició un dispositivo de búsqueda con la embarcación Salvamar Alkaid y el helicóptero Helimer 209, al que se unió una patrullera del Servicio Marítimo de la Guardia Civil en Cádiz. Hacia las 9.10 horas, la embarcación fue localizada a unas diez millas al suroeste de Tarifa, o lo que es lo mismo, a cuatro millas al norte de Tánger, por el Helimer 209, que comunicó la posición exacta a la Salvamar Alkaid para su interceptación.
Si bien el rescate se produjo en aguas jurisdiccionales marroquíes, los convenios internacionales atribuyen a España las competencias de rescate y salvamento, por lo que fueron los medios de este país los que efectuaron las correspondientes operaciones para rescatar a los supervivientes.
La embarcación estaba quilla al sol y sus tripulantes, apoyados sobre el casco. Estas 22 personas fueron trasladadas a bordo de la Salvamar Alkaid alrededor de las 9.45 horas, y después conducidas hasta el puerto tarifeño. Allí, les esperaban efectivos de Cruz Roja, que practicaron los primeros auxilios ante los síntomas de hipotermia que presentaban.
Fue entonces cuando los náufragos comenzaron a relatar el drama que acababan de vivir. Algunos testimonios coinciden en que la embarcación neumática de unos seis metros de eslora en que viajaban los indocumentados comenzó a zozobrar a causa de un golpe de oleaje, provocando la caída de unas 10 personas.
Inmediatamente después, una ola aún mayor habría acabado volcando la patera y el resto de desaparecidos, entre ellos varios familiares e incluso hijos pequeños de los supervivientes, se perdieron bajo las aguas. Según diversas fuentes, la mayoría de los testimonios sitúan el número inicial de tripulantes en 40, aunque algunos subsaharianos dicen que esta cifra podría elevarse a más de 50.
Según indicó la Guardia Civil, estaba previsto que durante la tarde de ayer comenzasen a prestar declaración las personas rescatadas, a fin de conocer con una mayor exactitud el número de posibles víctimas.
De igual modo, hasta ayer no se había podido identificar al patrón de la embarcación que volcó en aguas marroquíes. En las horas siguientes al rescate se incorporaron a la búsqueda de los desaparecidos el avión de Salvamento Marítimo Serviola 2, que sustituyó al Helimer 209 mientras se trasladaba a Jerez para repostar, y la embarcación de intervención rápida Salvamar Dubhe, que sustituyó a la Salvamar Alkaid.
Las últimas informaciones recibidas a última hora de ayer procedentes de Salvamento Marítimo apuntaban a que la búsqueda, hasta el momento, “no ha dado sus frutos” y que se interrumpiría al caer la noche para continuar hoy. En las últimas horas, se habían incorporado al dispositivo un barco militar marroquí y el remolcador Luz de Mar de Salvamento Marítimo.
Al cierre de esta edición ni un sólo medio informativo o institucional del Reino de Marruecos había ofrecido información referente a esta tragedia marítima que ha tenido lugar en aguas jurisdiccionales de este país.
Por su parte, el consejero andaluz de Empleo, Antonio Fernández, mostró su preocupación por los inmigrantes que podrían estar desaparecidos.
Durante la comisión parlamentaria de Empleo, Fernández se mostró esperanzado en el trabajo de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado para que los encuentren “a la mayor brevedad posible”.
Los colectivos sociales Algeciras Acoge y la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (Apdha) convocaron sendas manifestaciones en Algeciras y Cádiz en contra de las últimas llegadas de pateras a las costas gaditanas.
En Tarifa, han sido tres en el último mes, con al menos una víctima mortal, más los entre 18 y 30 desaparecidos de la patera de ayer. Por parte de Algeciras Acoge, la concentración, aún sin fecha, tendría lugar en la Plaza Alta. Su presidente, José Villahoz, indicó que el drama podría ir aún más allá para estas personas.
En principio, todos ellos serían repatriados, salvo que se aplique una excepción por “petición de asilo o razones humanitarias”, aunque recordó que la aplicación de la ley “es muy rígida” en estos casos.
La movilización convocada por la Apdha tendrá lugar el lunes día 8 a las 19.30 horas en la Plaza de San Juan de Dios de Cádiz, según informó la propia asociación.
De confirmarse que en la embarcación neumática viajaban entre 18 y 30 personas más, se trataría de la mayor tragedia relacionada con la inmigración en la provincia desde la muerte de 37 personas en aguas cercanas a Rota en 2003. El pasado año hubo 15 muertes de indocumentados, dos de ellas en el Campo de Gibraltar. En ninguno de los dos casos había una patera de por medio.
El 2 de febrero de 2008, agentes de la Guardia Civil hallaron en Barranco Hondo (Tarifa), el cadáver de una persona de rasgos magrebíes, mientras que el 5 de octubre, un hombre de mediana edad murió atropellado por un vehículo en la autovía A-381 Jerez-Los Barrios, cuando cayó a la calzada tras viajar desde el Puerto de Algeciras escondido en los bajos de un camión.
En la provincia murieron desde 2003 82 personas que intentaban entrar en el país de manera irregular. 55 lo hicieron en 2003, un año especialmente trágico. En 2004 fueron cuatro, seis en 2005; dos en 2007; y el único año sin muertes fue 2006.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es