Al Ayuntamiento se le empiezan a acumular las demandas en el juzgado contencioso por parte de la Agrupación de Técnicos Municipales del Consistorio (ATMJ). Primero fue el conflicto colectivo contra el ERE, después la demanda contencioso contra la RPT, las modificaciones y correcciones de errores, contra el reparto a dedo de adscripciones, contra los procedimientos de Libre Designación y contra las movilidades.
Ahora, a esta serie de frentes se unirá en breve la presentación, también en los juzgados, del conflicto colectivo contra la discriminación de la consolidación del grado personal de los laborales y el recién aprobado convenio colectivo, que el próximo lunes será sometido a votación en una asamblea de trabajadores en el Polideportivo Ruiz Mateos a las 12.30 horas por parte de CGT y SIP, las dos secciones sindicales que han votado favorablemente.
Así lo anunció ayer la presidenta y portavoz de este colectivo, Mila Abascal, que denunció que estos sindicatos pretendan además que las votaciones sean “a mano alzada” y no con voto secreto “como siempre se ha hecho y como establece la ley”, por lo que, de nuevo, los técnicos municipales rechazan frontalmente lo que califican como “el último intento de atropello a los trabajadores municipales”.
El sistema de votación impuesto ha sido para este foro la gota que ha colmado el vaso de una negociación de un convenio que consideran “una tomadura de pelo” al ser, a su juicio, “ilegal, peor que el anterior y arbitrario” tanto en las formas como en el contenido.
En este sentido, como ya advirtieron cuando empezaron las negociaciones, que se han “finiquitado” en menos de 15 días tras la aparición en escena de CGT y SIP, denuncian que “ha sido pactado en el seno de una mesa sin autoridad legal para ello”. Así, remitiéndose al reglamento de la Mesa General de Negociación, Abascal ha recordado que sólo pueden tratarse y aprobarse, en la misma, los asuntos comunes que afecten a la plantilla, de ahí que desde un principio la impugnaran.
“No podemos olvidar que en la Mesa de laborales la CGT no cuenta con el compadreo del SIP y está sola y en la mesa de los Funcionarios el SIP tiene que cumplir con las leyes funcionariales que les limitaría mucho sus prebendas. Por eso ambos sindicatos y el Gobierno Municipal no han consentido la negociación en ambas mesas”, sentenció. El documento, igualmente, es “peor” porque los trabajadores municipales “pierden” derechos adquiridos en los últimos años, en una votación que “sólo han respaldado” CGT y SIP, secciones que en la mesa sólo representan al 49% de la plantilla, apunta, tras resaltar que, precisamente en la etapa del PSOE, fue CGT el “único” sindicato que no firmó entonces el convenio colectivo.
De nuevo, denuncian, la “discriminación” del Ayuntamiento contra los técnicos es un hecho, mientras que la Policía Local vuelve a salir ganando. “Ahora el convenio les otorga nuevos beneficios que puede resultar que haya policías que lleguen a cobrar nóminas de 4.000 euros. Y no es de recibo que un policía local cobre más que un médico, un ingeniero, un arquitecto o un abogado municipal; ni que los auxiliares administrativos y los administrativos vayan a cobrar menos que un operario”, concluye.
Balance del último año: una gestión del PP “nefasta” y “discriminatoria”
La junta directiva de la ATMJ encabezada por su presidenta, Mila Abascal, hizo ayer balance de la “nefasta” gestión del Ayuntamiento en materia de personal tras apuntar que en estos últimos 12 meses el Consistorio “ha desordenado y desorganizado aún más la plantilla” y, para mayor agravante , añade, “se siguen haciendo todos los nombramientos a dedo, se asignan las retribuciones de modo arbitrario y sin procedimiento legal y se benefician a determinados empleados y a dos sindicatos, el SIP y la CGT”. Finalmente, como aseguró Abascal, la entrada en vigor de la RPT contra la que alegaron por activa y por pasiva, contando incluso con el apoyo de la Junta, ha demostrado todo y más de lo que se temían.
“Al entrar en vigor se llevaron a efecto las adscripciones a puestos de todos los empleados municipales, sin ningún procedimiento de provisión, ejecutando un documento no aprobado por ningún órgano municipal en el que se asignan los empleados a los puestos de la RPT de manera arbitraria, dando los puestos más valorados a los colaboradores del gobierno, amigos, allegados y a protegidos de la CGT”. Además, aseguran que en cuanto a los puestos de Jefaturas y Dirección de Servicio, se aprobaron nombramientos a través de un ‘simulacro de comisiones de servicio’, dadas a los mismos empleados que fueron nombrados a dedo por adscripciones provisionales al llegar el Gobierno actual en julio de 2011. Desde noviembre de 2012, agregan, hay 51 comisiones de servicio “provisionalísimas”. La puntilla, el complemento personal transitorio
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