El informe en cuestión, realizado por la Administración Marítima gibraltareña, incluye una serie de cuestiones de seguridad y de recomendaciones, aunque su objetivo no es buscar responsabilidades. Entre las recomendaciones existen varias dirigidas a los propietarios u operadores del New Flame, así como a los del Torm Gertrud, buque con el que colisionó en la madrugada del 12 de agosto de 2007, a las Autoridades Portuarias de Gibraltar y Algeciras y en varios apartados a la gibraltareña exclusivamente.
El informe asegura que las “actuales instalaciones de control de buque sen la Autoridad Portuaria de Gibraltar son inadecuadas para un puerto tan ocupado como es el del Peñón”. Esta es una cuestión de gran preocupación para la oposición, ya que a su criterio conlleva implicaciones de seguridad, operativas e incluso de seguridad.
Control de aguas
En declaraciones sobre esta cuestión, el líder liberal Joseph Garcia afirmó que el asunto era de gran preocupación para su coalición desde el punto de vista político. “Dado que tanto el Gobierno como la oposición española están afirmando que Gibraltar no tiene aguas territoriales, en la zona este o en cualquier otro área, es esencial garantizar que el Puerto de Gibraltar está capacitado para ejercitar el control adecuado sobre todas nuestras aguas”, señalan socialistas y liberales, concluyendo que además de estas consideraciones políticas, existen obviamente razones de seguridad por las que el Gobierno debe responder de la forma más rápida y actuar sobre las recomendaciones de los expertos.
No es la primera vez que se produce un informe de estas características en relación a accidentes marítimos en la zona, informe que realiza recomendaciones y observaciones de esta naturaleza. “Similares consejos han sido ofrecidos con motivo de accidentes anteriores, por lo que es inaceptable que el Gobierno no hubiera actuado antes del incidente del New Flame sobre estas recomendaciones”, señalan socialistas y liberales del Peñón.
El citado informe señala que el Puerto de Gibraltar “no ofrece en la actualidad un servicio de asistencia en la navegación por lo que es incapaz de evitar una colisión”.
Esta misma recomendación, recuerda la oposición, fue realizada en el informe sobre el accidente del Samothraki, ocurrido el 17 de marzo de 2007, cuando el buque encalló en los arrecifes de Europa Point. De hecho, añadían socialistas y liberales, se dieron los mismos consejos dos años antes cuando se produjo el incidente del carguero Azzahra, en diciembre de 2005.
Es significativo para la coalición que el Parlamento en sus sesiones 2007/2008 votara un montante de 500.000 libras (565.000 euros) para trabajos y equipos para el departamento portuario y sólo se hayan gastado 168.000. “Esto significa que el Gobierno tenía los fondos que deseaba para cumplir con las recomendaciones de los diferentes informes sobre accidentes en la Bahía”.
La oposición gibraltareña va más allá en sus declaraciones y señala que el Puerto de Gibraltar es incapaz de controlar el movimiento buques en la zona este del Peñón de forma directa, ya que debe depender del Ministerio de Defensa para que le suministre señales de control de los barcos fondeados en la zona.
Desguazado el cincuenta por ciento de la sección de proa de ‘Fedra’
La sección de proa del buque granelero ‘Fedra’, que fuera trasladada a las instalaciones del astillero gibraltareño de Cammell Laird, ya ha sido desguazada en al menos el 50 por ciento de su estructura. El buque ‘Fedra’ colisionó el pasado 10 de octubre contra las rocas del acantilado del faro del peñón, la misma madrugada que el buque ‘Tawe’ embarrancaba en la Punta de San García, provocando vertidos al mar.
Tras varios meses postrado en el lecho marino junto al acantilado y dividido en dos mitades, el ‘Fedra’ fue remolcado, tras vaciarse sus tanques del agua que había siso vertida para evitar su flotabilidad, a aguas de la bahía, donde permaneció varios días a la espera de conocer dónde cuál era el destino para proceder a su desguace, si a los astilleros de ‘Cernaval’ en Campamento o los de ‘Cammell Laird’ en Gibraltar.
Finalmente fueron los astilleros del Peñón los que ganaron esta batalla, que bien podría tildarse de política, y se encuentran en la actualidad inmersos en las labores de desguace del granelero.
La chatarra procedente de estos trabajos en el muelle de los astilleros, ya a la mitad de su conclusión, estaba previsto que fuera trasladada vía marítima a Portugal.
“El Foro atraviesa un momento de languidez”
El portavoz de Exteriores del PSOE en el Senado, José Carracao, declaraba en días pasados a EL FARO que la visita de la Princesa Ana de Inglaterra al Peñón podría hacer peligrar el Foro de Diálogo tripartito creado en 2004. “El Foro Tripartito atraviesa un momento de languidez y necesita un impulso. Es como si vamos en una bicicleta y si dejamos de pedalear, nos caemos. La visita no es lo mejor para que el diálogo continúe”, comentaba ayer el senador socialista.
Carracao ha hecho hincapié en que la visita de la hija de Isabel II y del Duque de Edimburgo es una “especie de provocación”, puesto que ya suscitó el enfado del Ejecutivo cuando estuvo en Gibraltar en junio de 2004 para presidir los actos conmemorativos del 300 aniversario de la ocupación británica.
El hecho de que el centro médico que va a inaugurar se haya construido sobre el istmo “enoja aún más”
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