El Gobierno local ha sacado adelante la subida de tres impuestos municipales, cumpliendo de este modo con el compromiso adquirido con el Ministerio de Hacienda en la última negociación para refinanciar su deuda con la Administración pública.
El PSOE ha votado en contra de todas esas subidas, al igual que Vox, si bien esta formación se ha abstenido en alguno de esos puntos. La Confluencia –integrada por Ganemos e IU- se ha abstenido en la mayor parte de esas revisiones e incluso el concejal Raúl Ruiz-Berdejo ha respaldado el incremento propuesto en el IAE.
Como era previsible, el debate no ha estado exento de reproches y cruces de acusaciones. La concejala socialista Laura Álvarez, llegó a mostrar un vídeo de la alcaldesa, María José García-Pelayo, grabado en vísperas de las pasadas elecciones municipales, en el que aseguraba que en caso de ganar esos comicios no subiría los impuestos.
Por tanto, a juicio de Álvarez estamos ante “un día muy triste” para la ciudad porque “se quita la careta un Gobierno liderado por una alcaldesa que miente más que habla”.
Los socialistas, de hecho, pueden “estar de acuerdo en subir los impuestos” porque lo consideran “una forma de redistribuir la riqueza”, pero “nunca” a través de “la mentira y el engaño”. “No estamos de acuerdo en ganar unas elecciones engañando”, apostilló Álvarez.
Además, acusó al Gobierno local de elevar este asunto a Pleno “cuando los jerezanos que pueden están en la playa”, toda vez que la decisión estaba ya adoptada “desde el pasado 16 de noviembre”.
“Han venido a muchos plenos engañando y sabiendo que habría una subida de impuestos”, subrayó Álvarez, que reprochó al Ejecutivo que justifique ese incremento en el acuerdo alcanzado con Hacienda para el pago de la deuda y sin embargo se olvide de que en ese mismo documento se advierta de la necesidad de “disminuir un 5 por ciento el capítulo de Personal”.
Es más, la concejala socialista recordó que los incrementos salariales que se han venido aprobando en estos últimos meses “han incrementado en un 25 por ciento el gasto estructural” de la Corporación municipal, por lo que “se está metiendo a Jerez en un socavón del que no va a sacar la cabeza”.
El concejal de Vox Ignacio Soto, ha rechazado también esa subida de impuestos, entre otras cosas porque no aprecia que el Ayuntamiento “se esté apretando el cinturón”, acusándose de actuar “de manera populista en todas sus acciones”. “No vendan en campaña que se van a eliminar trabas e incentivar la inversión y a la hora de la verdad suban los impuestos a las empresas. ¿Esa es la alfombra roja que iba a poner el PP a los inversores?”, preguntó.
Los concejales de La Confluencia –Raúl Ruiz-Berdejo (IU) y Kika González (Ganemos)- se han repartido el tiempo de sus intervenciones. El primero criticó a PP y PSOE por mantener actitudes diferenciadas en función de que estén gobernando o en la oposición, ya que “estas mismas propuestas de subida las hubiera traído el PSOE y el PP habría hablado de impuestazo”, mientras que ahora ocurre justo lo contrario.
González, por su parte, también reprochó a García-Pelayo que en campaña “dijera alto y claro que no iba a subir los impuestos” y que ahora lo defienda. De igual modo lamentó que por un lado se incremente la presión fiscal y por el otro se eleve igualmente a Pleno una serie de modificaciones presupuestarias por importe de 27,6 millones de euros de los que “poco más de un millón” va a permitir la mejora de los servicios ciudadanos.
García-Pelayo cerró el debate admitiendo que es cierto que se comprometió a no subir los impuestos, pero asegurando igualmente que hizo esa promesa porque el Gobierno anterior “decía que todo iba muy bien”. Además, sostuvo que en realidad no estamos ante “una subida”, sino ante “una revisión o actualización” que se hace “de la mano del Ministerio de Hacienda”.
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