La Hermandad del Nazareno ha decidido cancelar la fiesta motera que había organizado en el patio de su propia sede después de que un conocido profesional del sector hostelero advirtiera de la necesidad de acabar con este tipo de prácticas “antes de que otros colectivos, asociaciones o hermandades decidan hacer lo mismo”.
La hermandad con sede en San Juan de Letrán asegura que “en ningún momento” quiso “rivalizar” con el sector hostelero, explicando que la finalidad de esta fiesta motera no era otra que
“obtener un beneficio para poder ayudar a los demás”.
“Lo único que hemos pretendido es aprovechar este gran acontecimiento en nuestra ciudad para tal función, al igual que en reciprocidad la hostelería aprovecha el motor económico que supone la Semana Santa para ellos”, explica la hermandad a través de sus redes sociales.
Al mismo tiempo, se asegura que
no era intención de la entidad “molestar a nadie ni por supuesto realizar un acto sin los permisos oportunos”, ya que “previamente” se informó al respecto. “Entendemos que en la misma medida de legalidad, permisos y licencias están todos los componentes del sector hostelero en Jerez”, concluye el comunicado.
El hostelero, Miguel Ángel Carrasco, que en su comentario en redes aseguró que esta fiesta había sido denunciada por la
asociación Hostelería de Jerez, advirtió de que
este tipo de iniciativas “no se pueden permitir” y “hay que cortarlas desde ya”.
“Aprovechan un evento que trae a miles de visitantes para montar una barra en un patio,
entendemos que sin permiso, sin altas de trabajadores y con unos precios por debajo de lo habitual”, apuntó.
Al mismo tiempo, lamentó que los profesionales del sector estén “todo el año trabajando, pagando impuestos y sobreviviendo para seguir manteniendo puestos de trabajo legales, soportando inspecciones en todos los aspectos con unas obligaciones cada día más exigentes y ahora se les permite y se aprovechan de las circunstancias, y no pasa nada”.
Es bastante habitual que la Hermandad del Nazareno aproveche el patio de su sede para la organización de todo tipo de eventos, sobresaliendo sus zambombas o caracolás. En todas esas ocasiones se instala un servicio de bar.
