El Juzgado de Violencia sobre la Mujer nº 1 de Jerez sigue sin juez titular desde principios de año después de que
la magistrada que ocupaba su plaza, Raquel López-Vizcaíno, haya pasado al Juzgado de lo Social número 1. La previsión, según indican fuentes del CSIF, es que se le dé cobertura a esta vacante a finales de este mes. Mientras tanto, la única novedad, según indica la central sindical, ha sido reubicar a una jueza interina del Juzgado de lo Social nº1 al de Violencia hasta que la nueva juez se incorpore de forma definitiva. Una solución que desde CSIF califican de “parcheo de urgencia”. “Han desvestido un santo para vestir otro. Entendemos que así no se hacen las cosas”, critican. Desde el sindicato tienen claro que la administración, en este caso el Ministerio de Justicia, “debe actuar con más previsión” para que los funcionarios y la ciudadanía no sufran las consecuencias de su mala gestión.
Según denunció CSIF la semana pasada, la ausencia de la juez titular había obligado a los funcionarios a asumir competencias que no les correspondía y había obligado a suspender juicios en materia civil. Asimismo, otros magistrados que no eran titulares de dicho juzgado se estaban encargando de las guardias y de dar salida a los casos más urgentes.
Además, el PP de Jerez ha anunciado que llevará al próximo Pleno una moción para que desde el Ministerio se “acelere" la llegada del titular de un juzgado “fundamental” después de que las denuncias en materia de violencia de género hayan aumentado, según datos de los datos de la memoria del Consejo General del Poder Judicial.
Para el PP, la situación que se vive en los juzgados de Jerez para las víctimas es “desalentadora” y no parece incentivar a que las mujeres que sufren este tipo de violencia recurran a la justicia ya que se enfrentan a la falta de especialización de los jueces, la paralización y suspensión de los juicios y los largos retrasos en la resolución de los casos.
Obras para habilitar una sala especial para las víctimas de violencia de género en el juzgado
Precisamente, según ha podido saber este medio, estos días se lleva a cabo obras en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer, con sede en el edificio de la avenida Tomás García Figueras, para habilitar una sala común para las denunciantes. Para esta ampliación, se ha cogido una parte del espacio de Servicio Común. El objetivo es que las víctimas de violencia de género tengan más intimidad e independencia y estén más reservadas para reducir las posibilidades de coincidir y cruzarse con sus agresores en sede judicial.