El proyecto de Los Cañones, más cerca. El alcalde de Jaén, Julio Millán, ha confirmado el acuerdo alcanzado con los propietarios de los terrenos del paraje natural de Los Caños de río Frío para delimitar la zona sobre la que se planteará una oferta de compra o acuerdo de expropiación y ejecutar el proyecto.
Aunque inicialmente los propietarios defendían que debía ser la finca entera, el Ayuntamiento ha logrado que sólo sea la parte de la misma que se necesita para ejecutar el proyecto en este espacio natural cercano al Puente de la Sierra. “Ya hemos encontrado el objeto de intervención concreto, un acuerdo inicial hasta el que ahora no se había llegado”, ha confirmado a VIVA el alcalde, Julio Millán.
El objeto de expropiación se conocerá “en semanas”, pero la previsión es que la delimitación llegue “hasta la presa, pasando por un canal propiedad de la familia, llegando a lo que era la antigua piscifactoría, la parte inicial (puente) y la zona de la entrada”.
Están realizando las valoraciones técnicas para acordar la aportación económica. Han pedido apoyo de consultoría a la Diputación. “Queremos que la Diputación nos aporte un técnico y estamos en conversaciones con la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) para ver cuál sería la delimitación del dominio público hidráulico, para poder concretar la aportación que debería ser la base de valor de la expropiación o del acuerdo por convenio con la familia”, explica.
El Gobierno central anunció en 2015 una intervención en este espacio a través de la CHG. El proyecto de adecuación e intervención ascendía a más de 700.000 euros. “La vía de financiación podría ser otra. La idea es tener a disposición el suelo y presentar un proyecto de intervención en la zona con distintas fórmulas”, dijo. Ayer se confirmó que es una de las propuestas para la Inversión Territorial Integrada (ITI).
Para Millán, desde el punto de vista social, recuperar este paraje “supondría poder disfrutar de un espacio que despierta sensibilidad entre la población, por la añoranza y el recuerdo de tantas familias que lo han disfrutado, a pesar de ser de titularidad privada”. Desde el punto de vista medio ambiental, “se recupera un espacio natural”, y desde el plano económico, “es un atractivo a incorporar en la oferta de ocio y turística de la ciudad”.
La inversión prevista es de 745.650 euros, con cargo a la empresa pública Tragsa, y el plazo de ejecución previsto es de un año.
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