Hace unos días tuve el privilegio de poder contemplar de cerca las bellísimas pinturas murales del siglo XII que han aparecido en los Baños Árabes de Jaén y que serán visitables a partir del próximo 1 de mayo.
Un impecable trabajo coordinado por el restaurador José Luis Ojeda y su equipo de profesionales (Teresa López-Obregón, Olga Cano y Encarnación Gómez), ha sacado a la luz estas pinturas medievales que, ojo al dato, estaban bajo las carbonataciones y estratos de cemento que estaban superpuestos en las paredes. Es decir, iban a restaurar unos pocos restos de pinturas del siglo XII y se encuentran con la sorpresa de que había, de momento, hasta 4 veces más de lo que se veía y ahora, según anunció el Presidente de Diputación Provincial, se realizarán catas en todas las salas de los Baños Árabes en busca de posibles nuevas pinturas murales que se recuperarán y sacaran a la luz. Lo que significa que aún podemos encontrar más sorpresas.
La sensibilidad de la Diputación Provincial de Jaén con el patrimonio histórico ha sido clave. El hecho de poner en manos de especialistas, en este caso profesionales de la conservación y restauración, la solución a los daños que la humedad estaba produciendo en los escasos restos visibles, ha sido determinante. Este tipo de actuaciones si caen en manos de personas no especializadas pueden terminar arrasando con restos como los que ahora se han convertido en una auténtica joya, con 800 años de antigüedad.
Las pinturas están basadas en columnas con sus capiteles y arcos lobulados entrelazados. Hechas a la almagra, tienen similitudes con la decoración de la Giralda sevillana. Los especialistas han recuperado las pinturas originales y han realizado una reintegración cromática, dando así continuidad al colorido de las mismas y consiguiendo que los futuros visitantes podamos disfrutar de una visión de conjunto de esta decoración almohade.
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