Desde el Pago de la Fuente de la Peña y por el barrio de La Glorieta, en plena primavera y en un atardecer típico del mes de mayo. El Santísimo Cristo de Charcales ha celebrado este 13 de mayo su tradicional procesión, con una comitiva en la que la junta de Gobierno de Víctor Lombardo, Hermano Mayor, estuvo acompañada, en su primer año de mandato, de numerosos devotos y representantes de cofradías de Gloria, que llenaron de alegría el recorrido.
“Ha sido una romería con un gran afluencia y la procesión siempre es recibida con alegría en el barrio, en plenas fiestas. Es un Cristo muy milagroso y son muchos los jienenses que le tienen devoción y que nos acompañan cada año en la procesión”, reconoció a VIVA JAÉN el Hermano Mayor.
Es la romería más esperada de la capital y una fiesta arraigada en Jaén, en torno a un Cristo crucificado con su faldellín y espaldar bordado.
La jornada matinal arrancó como el día grande que se esperaba. El pasacalles por el centro de la ciudad, con estandartes y banderas de la Cofradía, y las ofrendas a la Patrona de Jaén, Nuestra Señora de la Capilla en la Basílica Menor Parroquia de San Ildefonso; y a Nuestro Padre Jesús en el Santuario-Camarín, animaron la mañana.
Tras la Misa oficiada en la Ermita por el párroco y consiliario Manuel Ángel Castillo, los cofrades celebraron una jornada de convivencia, antesala de una tarde de procesión que echó a la calle a los jienenses.
La entrada al barrio, con una sentida parada en la residencia Fuente de la Peña, donde los mayores interpretaron el himno del Cristo ante la Imagen; y la recogida de la Imagen en su Ermita han sido algunos de los momentos “más emotivos” vividos por los fieles.
Después de casi tres horas de procesión, los momentos cofrades más íntimos se vivieron en la Ermita, donde los devotos se recogieron y pudieron compartir los claveles de un trono con andas que, un año más, compartieron hombres y mujeres.
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