Los recortes del Gobierno Central en políticas activas de empleo para Andalucía supondrá una merma de 13,3 millones de euros. Concretamente, a Andalucía se le asignan 324,41 millones, que supone una reducción de un -3,95% con respecto a 2016.
Así lo adelantó ayer la delegada del Gobierno, Ana Cobo, mostrando su “malestar” a una disminución que no es aislada, sino que se viene repitiendo desde 2012. “Esta merma afectará a los más vulnerables, a las personas desempleadas, precisamente a las que más ayuda necesitan”, reconoció Cobo.
La reducción sólo se le aplica a Andalucía, una de las regiones más castigadas por el desempleo, la segunda con mayor tasa de paro del país.
Las 16 comunidades autónomas restantes contarán con más fondos, con un 5,14% más de media para combatir el paro. Cobo insistió en que la Junta, pese a esta importante merma de recursos, seguirá trabajando día a día por los 55.475 parados con que cuenta la provincia.
La Junta continúa cumpliendo con sus políticas activas de empleo y según Cobo, así lo constata la continua bajada en las cifras de paro de la provincia: en marzo bajó el paro interanual en 8.445 personas, la reducción es aún mayor con respecto a marzo de 2015 (-12.262) y más acuciada con respecto a marzo de 2013 (-18.813).
Ana Cobo reconoció que a Andalucía se le han asignado (en la Conferencia Sectorial de Asuntos Laborales) otros 33,8 millones para el programa de atención a parados de larga duración. La cuantía total ascenderá a 358,2 millones, 11 menos que en 2016. Este año, el Gobierno del PP dedicará 405 euros a cada persona desempleada andaluza (un 46% menos que en 2011).
En estos cinco años, Andalucía acumula casi 2.200 millones de euros menos en fondos para el empleo. Con respecto a 2011, la región andaluza ha visto disminuidos sus fondos un 53%, que equivale a 369 millones menos.
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