Impresionante Lunes Santo con La Amargura en la calle. La Hermandad de Nuestro Señor de la Pasión Despojado de sus Vestiduras y María Santísima de la Amargura está realizando una procesión de penitencia que emociona y deja huella en su itinerario, desde la parroquia de El Salvador.
Centenares de jienenses llenaron los alrededores del templo, con un sol que iluminaba una espera que no defraudó. La Cruz de Guía anunciaba la llegada de un misterio que este año ha lucido completo, con la incorporación de un sayón que iba desvistiendo a Jesús y un soldado romano montado a caballo y portando la sentencia condenatoria de Cristo. Era el estreno más esperado, con el que la Hermandad ha completado la imaginería del paso, iniciada en 1996, y que ayer aportó majestuosidad y belleza escultórica.
Desde que los costaleros pisaron la calle, el misterio procesionó con el paso al que tienen acostumbrado sus capataces, Rafael Mondéjar y Jesús Joyanes, que con cariño hablaban a sus hombres para guiarlos con el buen hacer que los caracteriza. Palabras llenas de aliento y sentimiento alimentan las ganas de mecer el misterio, que arranca aplausos a su paso entre numerosos jienenses. Y detrás de Jesús su Madre, María Santísima de la Amargura, que este Lunes Santo ha estrenado la Gloria del palio, una pintura que refleja la Anunciación de la Virgen por el Arcángel Gabriel.
La Reina del Salvador es la tercera dolorosa de Andalucía con más marchas dedicadas y hoy ha sido mecida al son de la marcha ‘Amargura’, la primera compuesta para la Cofradía por el reconocido compositor sevillano Manuel Marvizón. Interpretada por la Banda de Música Nuestra Señora de la Amargura-Sociedad Filarmónica, sonaron notas con las que la idiosincrasia de la Hermandad quedó manifiesta. El desfile luce por un itinerario que deja estampas llenas de emociones, devoción y fervor, como la petalada a la Virgen en el itinerario oficial. Este Lunes Santo es especial para los cofrades de La Amargura, en un 2017 en el que se ha cumplido el 25º aniversario de la bendición de Jesús Despojado.