El comedor de la parroquia de Belén y San Roque es uno de los termómetros más fieles de las necesidades por las que están pasando centenares de inmigrantes y personas residentes en la ciudad.
El párroco y responsable del mismo, Juan Herrera, ha confirmado a VIVA JAÉN que se han ofrecido hasta 330 comidas estos días, batiéndose el récord de años anteriores por la misma fecha. Noviembre es un mes de llegada de inmigrantes a la ciudad para la campaña de recogida de la aceituna y una vez pasada la primera quincena, el incremento es notable. En la última semana se han superado las 250 comidas.
Los más de cincuenta voluntarios que trabajan en la elaboración de las cenas por turnos han atendido a un mayor número de personas. En el comedor, cuando una persona termina pasa otra, se sienta, come y deja su sitio a otra persona con necesidad. Así de lunes a sábado a partir de las siete de la tarde. Los domingos se ofrecen bocadillos, para no dejar desabastecidos a quienes más lo necesitan.
El párroco de Belén y San Roque teme que con la proximidad de la campaña olivarera y ante las necesidades que atraviesan un ingente número de personas, el total de comidas no deje de aumentar durante los próximos meses.
El comedor abrió sus puertas el 1 de junio de 2009 y desde entonces no ha dejado de atender las necesidades alimenticias de jienenses e inmigrantes.
