Al Real Jaén se le olvidó ayer llevarse hasta Málaga la maceta con la flor que ha tenido en los últimos compromisos. Quizás de forma intencionada porque el agua que cae en la capital del Santo Reino es de esas que resucitan cualquier planta o quizás porque se percibió que ya no hacía falta y me da que es cuando más flor necesita el equipo blanco. Más suerte porque a los de la zona de play off no le gana a ninguno y esto es un síntoma que hace temer en el play off. Si en la fase regular no le ha rascado a ninguno de esa zona una victoria, ¿qué se puede esperar después?
El juego del equipo de Fajardo en Málaga no se ajustó ni lo más mínimo a las pretensiones del entrenador del Real Jaén. Ni presión en el bloque alto que le diera opciones de marcar, ni dominio de balón. Esos eran sus planes y no salió ninguno. Y menos mal que el portero del Real Jaén, el mejor de la categoría para Alejandro Álvarez, estaba ahí, como un coloso para evitar males mayores. Si hay que hacer reflexión quizás es el momento, pese a los números y pese a la excelente segunda vuelta. Y autocrítica debe hacerse desde el cuerpo técnico también porque aquí ganan todos y pierden todos y todo eso empieza desde la base que es el banquillo.
Dormir a tres puntos del Torremolinos comenzó a ser una pesadilla cuando arrancó el partido. Javí Sánchez ya tuvo que hacer una de sus magistrales intervenciones ante un filial del Málaga que salió a comerse un partido en el que los blancos solo tuvieron disparos lejanos y un remate de cabeza de Mauro por encima del larguero. Nada más, se empeñe quien se empeñe en hacer brillar lo que no brilla y sin flor, ojo.
La reanudación trajo el mismo guión de la primera mitad y con el santo de Javi Sánchez salvando un mano a mano ante Chupete antes de irse al descanso. El Real Jaén no estaba, pensaba en su flor, en el agua que le estaría cayendo para que creciera porque lo que es ideas desde el terreno de juego y desde el banquillo había pocas para sacar adelante un partido que se terminó de torcer cuando Chupete remató a placer en un error de marcaje que adelantaba al Malagueño en el minuto 51. El gol fue la puntilla y con casi 40 minutos por delante los blancos fueron incapaces de levantarse, con un juego pésimo y que hace dudar incluso de si será capaz el equipo de Emilio Fajardo de lograr el segundo lugar para tener ventaja campo en el play off, porque la fase regular se acaba y la historia esa de alcanzar al Torremolinos en la penúltima jornada suena a otra cosa que a posible. Bueno, si es con un vivero de flores o florones tal vez sí que sea factible, pero habrá que llevárselas a todos los campos.
