El concejal de Mantenimiento Urbano en funciones, Javier Padorno, ha realizado una visita técnica a las obras de accesibilidad que esta área municipal está ejecutando en la calle Antonio Muñoz Molina, en la segunda fase del Bulevar.
Javier Padorno ha explicado que “se trata de unos trabajos que se llevan a cabo a petición de una familia que cuenta con una persona invidente que no contaba con la condiciones necesarias para poder salir de su domicilio de forma autónoma, por lo que llevaba muchos años reclamando esta mejora de movilidad y hemos intervenido para adecuar el entorno”.
"Para ello, nos pusimos en contacto con la ONCE, para que desde esta entidad nos ofrecieron algunas directrices que complementasen al proyecto, de manera que cubriese todas las necesidades de las personas usuarias porque, como bien recuerda la Organización, la accesibilidad es un factor clave para la inclusión y un indicador claro del progreso y del desarrollo social. Gracias a esta intervención, las personas invidentes que viven en esta calle podrán salir y entrar a sus domicilios sin barreras arquitectónicas y podrán realizar desplazamientos por los aledaños sin necesidad de que otra persona les acompañe; un hecho que hasta ahora no era posible debido al estado en el que se encontraba el pavimento, que ahora cuenta con baldosas direccionales y podotáctiles”, indicó el edil.
El responsable municipal del área ha asegurado que “esta actuación tiene que ser punto de partida de otras medidas de accesibilidad a toda la calle así como a las adyacentes para que estas personas puedan realizar acciones cotidianas como acudir a hacer la compra o acceder a servicios básicos; además, son acciones beneficiosas para toda la población, puesto que se facilita el tránsito al eliminar escalones, desniveles o hundimientos. Este tipo de intervenciones hacen que la labor política, el esfuerzo y la dedicación merezcan la pena, pues vemos cómo con ellas se mejora en gran medida la vida de las personas y se ofrecen mayores oportunidades de bienestar, desarrollo personaly calidad de vida”, ha asegurado.
Por su parte, Daniel Rojas, que solicitó esta intervención al consistorio, ha afirmado que ha reclamado esta obra “desde hace años, puesto que tropezaba y sufría caídas, de manera que no tenía autonomía" en su actividad diaria. "Ahora no habrá obstáculos y podré ir solo a distintos lugares del barrio”, añadió. Asimismo, su madre, María del Rosario Valenzuela, agradeció al Ayuntamiento “una obra que dará a Daniel una calidad de vida que no tenía. "No quería ni coger el bastón ni salir a los comercios de la zona por miedo a sufrir accidentes. Esto nos ha devuelto la vida porque si veo que mi hijo tiene calidad de vida, la tengo yo”, apostilló.
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