Las obras de adecuación del entorno de la Catedral se retoman, con la reparación del pavimento del segundo tramo de la Calle Campanas y remates de obra de la Calle Maestra. Así lo ha confirmado el concejal de Mantenimiento Urbano, Javier Padorno.
"Desde este lunes se está procediendo a demoler el adoquinado antiguo que no se eliminó cuando se hizo el soterramiento de las líneas eléctricas desde la esquina de la Plaza de Santa María con la Calle Maestra, hasta la confluencia de la calle Campanas con la Plaza de San Francisco. Posteriormente, se colocará una capa de hormigón armado con fibras sobre la que se asentarán los adoquines nuevos, con lo que la calzada quedará igualada y concluirá el proyecto de intervención sobre esta vía”, explica.
El edil ha indicado que “
la previsión de duración de estas labores es de aproximadamente un mes” y que desde hoy se trabaja "en los remates de obra de la calle Maestra, relacionados con los entronques con la Plaza de Santa María y la calle Madre de Dios, las arquetas o la aplicación de juntas entre las líneas de agua y las fachadas”.
Padorno se ha referido a la repercusión de estas obras sobre el tráfico rodado en la zona. "Los vecinos tendrán el acceso garantizado a sus garajes por la calle Obispo González, que estará abierta para el tránsito de vehículos, así como la Plaza de Santa María. Se producirán cortes de tráfico desde la Plaza de San Francisco hasta el punto de obra de la calle Campanas, en sentido ascendente hasta la conclusión de esta intervención”, ha confirmado.
Al término de este proyecto, las calles del entorno de la Catedral "presentarán un aspecto uniforme en consonancia con el entorno”, ha valorado.
Además, las labores también se centran en la eliminación de contaminación visual. Como ejemplo de ello, el Consistorio trabaja con Endesa y empresas de telefonía para ocultar el cableado en distintos puntos.