La crisis del coronavirus y sus consecuencias para un cultivo como la fresa han motivado que el volumen comercializado a lo largo de esta campaña, que ya se encuentra en su recta final, haya caído un 21,8 por ciento con respecto a la media de los últimos siete años.
Así se recoge en el último informe realizado por el Observatorio de Precios de la Junta de Andalucía, consultado por Efe, en el que se recuerda que la campaña de la fresa fue sorprendida por la crisis del coronavirus en el pico de producción, por lo que ante la acusada bajada del consumo producida, el sector se vio forzado a enviar fresa a industria prematuramente, a retirar fruta y a reducir superficie de cultivo.
La reactivación de las ventas que hubo durante la Semana Santa y la previa, volvió a disminuir sumando, al abandono de las fincas unas desfavorables condiciones meteorológicas.
De esta forma, al llegar a la cola de la campaña, se estima que el volumen de comercialización ha caído un 21,8 por ciento respecto a la media de las últimas 7 campañas.
De esta forma esta cifra debería de situarse en estos momentos en un 89,86 por ciento de la producción total esperada de fresa para consumo en fresco, sin embargo, se calcula que este porcentaje se ha reducido al 68,06 por ciento.
En cuanto al precio que percibe el agricultor, a lo largo de las últimas semanas se han recuperado situándose en la última semana en torno a 1 euro/kg.
En cuanto a la frambuesa, el informe precisa que la demanda, en la actualidad, es alta y la campaña se encuentra en el periodo de máxima producción, habiéndose recolectado el 76,66 por ciento de lo que se espera producir en el conjunto de la misma.
Además, al destinarse esta fruta mayoritariamente al mercado internacional y comercializarse fundamentalmente en la gran distribución y cadenas de supermercados, las ventas han seguido fluyendo.
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