A finales del pasado mes de noviembre los vecinos de Costa de la Luz lograban poner fin a la pesadilla de tener que convivir con un local ocupado en el barrio. Sin embargo, el desalojo no ha terminado con los problemas en la zona y los vecinos ya han puesto en marcha nuevas medidas reivindicativas para solucionarlos.
Así, la Asociación de Vecinos Costa de la Luz ha iniciado una campaña de recogida de firmas que harán llegar al Ayuntamiento de Huelva con la intención de que la administración municipal dé una respuesta “inmediata” a “la caótica situación en la que se encuentran las infraestructuras del barrio”, entre otras demandas.
En tan solo unos días, según explica el presidente de la asociación vecinal, Carmelo Merchán, ya se han recogido “más de mil firmas”, que se entregarán al Ayuntamiento en febrero.
En un comunicado, la asociación de vecinos recuerda que el Ayuntamiento se ha comprometido hasta en dos ocasiones a responder a las demandas vecinales, recogidas en sendas mociones de Izquierda Unida y Ciudadanos, que fueron aprobadas por unanimidad.
Sin embargo, el Consistorio no ha tomado ninguna medida al respecto y los vecinos han decidido volver a darle un toque de atención. Si la Administración municipal sigue haciendo oídos sordos, advierte Merchán, los vecinos están dispuestos a volver a “salir a las calles” con nuevas protestas. “Lo que tenemos claro es que el barrio hay que arreglarlo”, indica el presidente de la asociación.
Además del “arreglo urgente de las infraestructuras y equipamientos del barrio”, los vecinos demandan al Ayuntamiento que intensifique las tareas de limpieza ante “el lamentable estado en que se halla el barrio” donde la presencia de roedores es “constante”.
Otro de los problemas que más preocupan a los residentes y comerciantes es el de la movilidad y la falta de aparcamientos así como las “provocaciones” de los gorrillas. La zona, recuerdan, sigue esperando el tan “cacareado” plan de movilidad de la ciudad. La asociación demanda también al Ayuntamiento que revise las conexiones con nuevas áreas cercanas en expansión ya que “gran parte del barrio se encuentra aislado”.
Igualmente, los vecinos quieren conocer y decidir el futuro de la parcela anexa al centro hospitalario Quirón-Salud. Esta parcela, explican, se encuentra actualmente “en pésimas condiciones” y se ha convertido en un recinto “que viene siendo explotado por gorrillas como bolsa de aparcamiento, sin tan siquiera haberla adecuado para este menester”.
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