Los regantes del entorno de Doñana, tras conocer la decisión de la Comisión Europea de llevar a España ante el Tribunal de Justicia de la UE por desproteger este humedal Patrimonio de la Humanidad, consideran que las cosas en este espacio "no se están haciendo tan mal".
La CE justificaba su decisión, la cual trascendió a finales de la semana pasada, en que no se han tomado las medidas adecuadas para proteger las masas de agua subterránea que alimentan el humedal de Doñana; unas masas de agua que se han visto perjudicadas, principalmente, por las extracciones de agua para uso agrícola.
En declaraciones a Efe, el presidente de la Plataforma en Defensa de los Regadíos del Condado, Cristóbal Picón, ha indicado que los agricultores llevan trabajando en esta zona muchas décadas y con el paso del tiempo se han ido "adaptando a las tecnologías y requerimientos" y su agricultura es "totalmente sostenible con el entorno".
Han subrayado que como pieza y actores importantes de Doñana también pretenden "que exista solución", remarcando que esta pasa por una transferencia de 20 hm 3 , que ya se ha aprobado, para la que es necesario acometer el desdoble del túnel de San Silvestre.
"Con el agua superficial se dará cierre a todos los pozos y se garantizará así que el acuífero no sufra en ningún momento", ha manifestado.
Sobre el estado de Doñana, ha recordado que es el segundo parque nacional español, junto con Sierra Nevada, "incluido en la Lista Verde sobre Áreas Protegidas y Conservadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN)".
Este reconocimiento, unido al hecho de que el Instituto Geológico Minero de España (IGME), que es el que analiza el estado de las aguas subterráneas de Doñana, haya asegurado que "están recuperándose", evidencia, a su juicio que "las cosas no se están haciendo tan mal".
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