Las pruebas realizadas a dos de los tres jugadores del Real Madrid que se lesionaron en Balaídos, desvelan lesiones de importancia en el brasileño Casemiro, un fuerte esguince de tobillo, con afectación de sindesmosis, y Nacho Fernández, que tiene dañado el ligamento colateral interno de la rodilla derecha.
El tercer futbolista que se someterá a una resonancia magnética el martes será Sergio Reguilón, con problemas en los isquiotibiales y la esperanza de que sus molestias se queden en una contractura sin que haya rotura muscular. Lo conocerá mañana cuando se rebaje la inflamación en la zona afectada, que le impidió acabar la primera mitad en Vigo ante el Celta.
Al ser problemas óseos, el cuerpo médico del conjunto madridista ya pudo realizar las pruebas a Casemiro y Nacho para emitir un parte médico en el que confirma el alcance de las lesiones. El brasileño sufre un esguince fuerte de tobillo por la entrada que sufrió de Maxi Gómez, que presenta sindesmosis.
"Tras las pruebas realizadas hoy a nuestro jugador Casemiro por los servicios médicos del Real Madrid se le ha diagnosticado un esguince en el tobillo derecho con afectación de sindesmosis. Pendiente de evolución", reza el parte.
La sindesmosis de tobillo es una lesión poco frecuente que alarga el tiempo de recuperación del futbolista, al estar dañada la articulación tibio-peronea distal. Se estima que el centrocampista del Real Madrid tendrá que estar entre tres semanas y un mes para su total recuperación.
Mientras, a Nacho "se le ha diagnosticado una desinserción del ligamento colateral interno de la rodilla derecha", que le tendrá alrededor de dos meses lejos de los terrenos de juego.
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