La junta de accionistas de Carbures que se celebra en su sede social de El Puerto de Santa María (Cádiz) el martes 13 de diciembre tendrá un ingrediente adicional para darle aún más emoción al enfrentamiento que se vivirá entre los dos bloques de accionistas enfrentados, el afín al presidente Rafael Contreras, y el núcleo que respalda al exconsejero delegado, José María Tarragó, antiguo aliado de Contreras.
Y es que el primero ha perdido casi un tercio de su peso accionarial en la empresa en los días previos a esta reunión clave entre los socios del grupo industrial especializado en fibra de carbono para aeronáutica y automoción. Contreras controla ahora el 10,8% de la empresa, desde el 14,6% que poseía previamente. Esta reducción se debe al pago de deudas con acciones de Carbures que la sociedad Neuer Gedanke (a través de la cual Contreras participa en la compañía) ha realizado a dos acreedores. Así lo comunicó Carbures a la bolsa la semana pasada.
Contreras pasa a tener una participación menor que la de Tarragó (a través de su firma Lacus) y la sociedad Anangu, que suman en la compañía un 13,2%. Anangu es un grupo catalán, controlado por la familia Santacana, que desembarcó en Carbures en 2014 prestando 13 millones de euros.
Anangu y Lacus piden que Tarragó pueda entrar en el consejo de la empresa, que tiene 9 miembros pero pueden ampliarse hasta 12 según los estatutos de la sociedad. De hecho, en el orden del día de la junta ya estaba previsto, antes de incluir la petición de estos socios críticos, que entrara en el órgano de gobierno un consejero independiente, Rafael Suñol.
La junta servirá para medir las fuerzas de cada facción, ya que Contreras cuenta con el respaldo inicialmente del fondo BTC, que posee otro 10% de la compañía. Y del también accionista significativo, y consejero del grupo, José María Vallejo (tiene el 2,27%).
Al grupo de Anangu y Lacus se unirá el apoyo de un grupo de accionistas minoritarios liderados por Antonio Romero, miembro de la familia que controla la bodega Rives de Jerez, inversor en varias empresas que cotizan en el MAB (como Carbures) y socio de Tarragó en otras empresas. Todos critican la opacidad de Contreras y el rumbo que sigue Carbures.
